La actriz estadounidense Katherine Heigl (42), conocida por haber interpretado a Izzie Stevens en la serie de drama médico Grey’s Anatomy, confesó que tras su fama y las polémicas de las que fue parte, “sentía que prefería estar muerta”.

Heigl participó en la producción de Shonda Rhimes entre 2005 y 2010, papel con el que obtuvo un Emmy y dos nominaciones al Globo de Oro.

En la trama, protagonizada por Ellen Pompeo como Meredith Grey, comenzó siendo una interna de medicina quirúrgica y terminó siendo una reputada médica. Abandonó la serie en la sexta temporada.

En conversación con David Letterman, en 2009 se quejó de trabajar 17 horas al día en Grey’s Anatomy, lo que le valió ser calificada, reconoció, como una actriz “difícil”.

“En ese momento, me dijeron rápidamente que me callara. Cuanto más dije que lo sentía, más lo querían (…) Cuanto más aterrorizada y asustada estaba de hacer algo mal, más me parecía que realmente había hecho algo horriblemente mal”, dijo en conversación con el Washington Post.

“Es posible que haya dicho un par de cosas que no gustaron, pero luego eso escaló a ‘es ingrata’, luego eso escaló a ‘es difícil’, y eso escaló a ‘no es profesional‘”, confesó.

Toda esta situación, deslizó, afectó su reputación como artista, aunque ahora trabaja en reconstruirla. “Me tomó mucho tiempo sentirme lo suficientemente segura para leer sus comentarios porque asumí lo peor”, aseveró.

Ese tiempo de “rechazo” por parte de la industria y sus fanáticos hizo que resurgieran sus problemas emocionales. Desde joven estuvo afectada por la ansiedad, un trastorno que según el sitio especializado Medline Plus produce “sentimientos de miedo, temor e inquietud”. Dijo que no podía controlarlo: “No tenía herramientas”.

En 2015 finalmente fue diagnosticada con ansiedad y comenzó una terapia, tras pedirle a su familia que le “encontraran un lugar que pudiera ayudarme”. “Sentía que prefería estar muerta”, confesó, al mismo tiempo que manifestaba que no se dio cuenta “de la ansiedad con la que estaba viviendo hasta que me puse tan mal que tuve que buscar ayuda”.

Entre otras producciones en las que ha participado Heigl se encuentran Home sweet hell, Suits y The happytime murders. Por ahora trabaja en su nuevo personaje en la serie de Netflix Firefly Lane, que llega a la plataforma en Estados Unidos estre 3 de febrero.

La actriz también fue parte de la polémica que terminó con el intérprete de Preston Burke (Isaiah Washington) fuera de la producción, luego que tratara de maricón a T.R. Knight que actuó como George O’Malley. En ese momento, la orientación sexual del actor no era pública.

Según trascendió, el incidente habría ocurrido mientras discutía con Patrick Dempsey, que interpreta al médico neurocirujano Derek Shepherd en la trama.

Tras el episodio, que fue negado publicamente por Washington, Heigl habló en la sala de prensa de los Globos de Oro en 2007. “Voy a ser realmente honesta, él no debe hablar en público. Lo siento, no es necesario decirlo, no estoy de acuerdo con eso”, dijo.

Luego de la controversia, una fuente cercana a Heigl afirmó al portal estadounidense Page Six que ella “defendió a su amigo cercano cuando Isaiah lo insultó (…) Eso es un discurso de odio, no libertad de expresión. Está orgullosa de haberlo defendido. Katherine es y siempre será una defensora y aliada de la comunidad LGBTQ”