A menos de dos días de su estreno, Enola Holmes se convirtió en lo más visto de Netflix en Chile. Con una historia rápida y dinámica, la película de Millie Bobby Brown está arrasando en la plataforma de streaming.

Pero no sólo Millie está llamando la atención en esta producción que cuenta la historia de la hermana adolescente de Sherlock Holmes, sino que también está lanzando a la fama a un joven y hasta ahora no tan conocido actor británico.

Louis Partridge está pronto a cumplir 17 años y promete convertirse en un nuevo ídolo adolescente. En la película, el artista da vida a Lord Tewksbury, marqués de Basilwether, un joven que huye de su aristócrata familia y se cruza en el camino de Enola, mientras esta busca a su madre desaparecida.

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La cinta es el primer gran papel de Louis, quien previamente había participado en varios cortometrajes y tenido roles no muy grandes en algunas películas y series. Una de ellas era Medici: Masters of Florence (2019), donde interpretó a Piero de Medici.

Partridge quien sigue en el colegio, es autodidacta y no tiene entrenamiento como actor, pero esto no le ha impedido recibir buenas críticas por su rol, donde se destaca la espontaneidad que aporta al filme y la química que consigue con Brown.

“Nunca estuve en una escuela de actuación, así que supongo que la mayor parte es instinto y hablar con la gente en el set, actores mayores que tienen más experiencia que yo”, aseguró el actor en conversación con BioBioChile.

“Creo que es muy interesante conocer los métodos -de actuación- de otras personas, porque yo no tengo un método todavía, así que me gusta ver cómo lo hacen las otras personas”, reconoció y agregó que también intentó establecer una conexión con su rol.

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De hecho, la historia de cómo se enteró de que había conseguido el rol en Enola, es una anécdota que resalta su juventud. “Estaba en mi cocina y estaba por irme para rendir un examen en la escuela para el que me había preparado por tres años, así que ya estaba un poco estresado. Y recibí la noticia y quedé como ‘Oh, Dios mío"”, recordó.

“Estaba muy emocionado y no podía pensar claro, y todo lo que había aprendido justo antes para el examen… lo olvidé. Me fue horrible, pero no me importó porque había conseguido este papel que quería mucho”, reconoció.

Fueron experiencias como esas que hicieron que Millie y Louis se convirtieran en buenos amigos durante el rodaje, pese a que él jamás había visto Stranger Things.

“El ingrediente secreto para tener una buena química en pantalla, es sentirse cómodo el uno con el otro, y para lograr eso tienes que pasar tiempo con la otra persona, hacer cosas juntos y básicamente hacer tonteras en frente del otro, porque cuando te deshaces de los nervios, puedes hacer cualquier cosa”, afirmó.

Una época interesante

Lord Tewksbury, marqués de Basilwether, es un personaje de inmediato captó la atención del joven actor, pero más que eso fue la época de grandes cambios en la que se ambientó la película.

“Creo que su historia es muy interesante. Todo lo que pasaba en la Inglaterra 1884, eran cambios muy locos y una masiva revolución respeto a las clases sociales”, explicó.

Habían valores tradicionales, aristocracia y tradición, pero también estaban surgiendo estos nuevos grupos de personas con nuevas ideas de libertad y de liberarse… Eso fue muy interesante para mí”, añadió.

Eso sí, el actor reconoció que no era un gran fan de Sherlock Holmes. “No había leído ninguno de los libros, había visto algunas de las películas, pero nunca me había conectado con él”, afirmó.

“Cuando consigues un personaje lees muchas veces el guión, para tratar de saber exactamente lo que pasa con él por dentro y por fuera… Realmente me involucré con mi personaje y con Enola, y me involucré con ellos más que con Sherlock”, cerró.