Este miércoles se llevó a cabo de manera virtual la ceremonia anual de los Premios Diana, galardón entregado en memoria de la fallecida princesa de Gales que justamente esta jornada habría cumplido 59 años.

En la transmisión, que tuvo 67 minutos de duración, apareció el príncipe Harry para entregar un mensaje en su calidad de hijo menor de la ex activista, que murió en un accidente de tránsito en París, en 1997.

“Estoy muy orgulloso de ser parte de estos premios que honran el legado de mi madre y sacan lo mejor en personas como ustedes”, partió el otrora militar, hoy retirado del trabajo real y radicado junto a su esposa Meghan e hijo Archie en Los Ángeles, California.

“Todos ustedes están haciendo un trabajo increíble y, en un momento de gran incertidumbre, han encontrado el poder e inspiración dentro de ustedes para dejar una marca positiva en el mundo, y me encanta que los Premios Diana puedan ayudarlos a hacerlo”, dijo Harry.

Tras ello, el resto de su discurso lo ocupó para saludar a los ganadores del premio, destacar lo que significó la figura de su madre, su legado, resaltar su rebeldía – que en más de una ocasión la puso en aprietos – y discutir el racismo, en un claro guiño al movimiento Black Lives Matter.

“Sé que mi madre ha sido una inspiración para muchos de ustedes y les puedo asegurar que habría estado defendiendo sus intereses. Como muchos de ustedes, ella nunca tomó el camino fácil, ni el popular o el cómodo. Pero defendió algo. Y defendió a personas que lo necesitaban”, agregó el duque de Sussex.

“En este momento, estamos viendo situaciones en todo el mundo donde la división, el aislamiento y la ira están dominando a medida que el dolor y el trauma salen a la superficie. Pero veo la mayor esperanza en personas como ustedes y estoy seguro del futuro del mundo y su capacidad de sanarse porque está en tus manos”, comentó.

“Mi esposa (Meghan) dijo hace un tiempo que nuestra generación y las anteriores no han hecho lo suficiente para enmendar los errores del pasado. Yo también lo siento, siento que no hayamos llevado al mundo a un lugar donde te mereces estar. El racismo institucional no tiene cabida en nuestras sociedades, pero sigue siendo endémico. El sesgo inconsciente debe ser reconocido sin culpa para crear un mundo mejor para todos ustedes”, añadió.

A modo de terminar su intervención, Harry dijo querer que supieran que están “comprometidos a ser parte de la solución y ser parte del cambio que están liderando. Ahora es el momento y sabemos que pueden hacerlo”, cerró.

Los Premios Diana fueron establecidos en 1999 por el gobierno laborista de Tony Blair y en 2006 se transformaron en una organización benéfica independiente que busca celebrar y continuar el legado de Diana, además de reconocer públicamente a jóvenes que “ayuden a sus comunidades de manera extraordinaria”.

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