Carl Reiner, un versátil y venerado comediante estadounidense que ganó nueve Emmys y participó en la franquicia “Ocean’s Eleven”, murió a los 98 años de causas naturales en su casa de Beverly Hills, California (oeste de EEUU).

Así lo confirmaron amigos del escritor, actor, director y productor, tras informes de prensa divulgados la noche del lunes.

Reiner, nacido en el Bronx, Nueva York, quizás fue más conocido por la galardonada comedia de TV de los años 60 “The Dick Van Dyke Show”, que creó y en la que interpretó un hilarante papel, que le reportó cinco Emmys.

En sus primeros años en el negocio del espectáculo, Reiner trabajó con leyendas de la comedia, como Syd Caesar y Mel Brooks, de quien fue amigo cercano, y con quien trabajó en la decada del 60 en la popular obra de teatro “2001 Year Old Man”.

En años posteriores, sus créditos como director cinematográfico incluyen “Oh God”, de 1977, protagonizada por George Burns; “The Jerk” (1979), con Steve Martin; y “All of Me” (1984), con Martin y Lily Tomlin.

En 1995, Reiner recibió el premio Writers Guild a la trayectoria por su carrera como guionista de televisión. En 2000, ganó el premio Mark Twain al Humor, otorgado por el Kennedy Center.

Apenas tres días antes de su muerte, Reiner escribió en su cuenta de la red Twitter un mensaje de gratitud por su larga vida.

“Nada me complace más que saber que he vivido la mejor vida posible al haberme encontrado & casado con mi talentosa Estelle (Stella) Lebost— mi socia para traer a Rob, Annie & Lucas a este necesitado mundo en evolución”, expresó.

Las condolencias por la muerte de Reiner se multiplican, incluyendo una del gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo.

“Carl Reiner, nacido y criado en el Bronx, hizo una comedia para TV que perdura hasta el día de hoy. Hizo reír a Estados Unidos, un auténtico regalo”, dijo también en Twitter.

Otra leyenda de la comedia estadounidense, Alan Alda, también le rindió tributo.

“Mi amigo Carl Reiner murió anoche. Su talento vivirá por largo tiempo, pero la pérdida de su bondad y decencia deja un vacío en nuestros corazones. Te amamos, Carl”, señaló Alda.