Meghan Markle no logra tener un respiro. Y es que cada cosa que hace desata una ola de críticas de parte de sus detractores.
La última polémica que la envuelve tiene relación a la invitación que le extendió la versión británica de la revista Vogue, para editar la edición de septiembre, donde se reunió a un grupo de mujeres destacadas en distintos ámbitos.
El número titulado “Fuerzas de cambio” cuenta con 15 figuras “unidas por su valentía rompiendo barreras”, incluyendo a la mundialmente reconocida primatóloga Jane Goodall, a la ex primera dama Michelle Obama y a la activista Greta Thunberg.
El problema es que luego que se mostrara la portada de la revista, varios cibernautas comenzaron a acusar a la duquesa de Cambridge de copiar la cubierta de un libro australiano, donde también se destacaba a mujeres importantes y que la misma duquesa ayudó a producir.
The Game Changers era el nombre de la publicación escrita por Samantha Brett y Steph Adams, cuya portada, al igual que Vogue, muestra las fotografías en blanco y negro de 15 mujeres.
Brett aseguró a Daily Mail Australia que quedó asombrada cuando vio la portada de Vogue. “Obviamente es muy halagador, obviamente a ella le gustó nuestro concepto”, dijo. “Amo a Meghan y soy una gran fan, pero si lo que la gente nos está alertando es cierto, entonces es extremadamente decepcionante”, finalizó.
El libro que fue publicado en 2016, fue un trabajo de años de sus autoras quienes contaron con la ayuda de Meghan, cuando la duquesa aún no se unía a la familia real.
Según Vogue, fue idea de Markle poner a las mujeres en la portada de la revista para hacer una especie de metáfora e “incluir al lector y animarlo a usar sus propias plataformas para efectuar el cambio”.