Al parecer, Lady Gaga se ha cansado de estar en el ojo de la tormenta pública, tras la separación del actor estadounidense, Bradley Cooper y la modelo rusa Irina Shayk.
La prueba, vino de un concierto que la cantante neoyorquina realizaba en Las Vegas el pasado fin de semana.
Un hombre en el público gritó “Where is Bradley”, al momento en que la interprete se disponía a iniciar la canción “Shallow”, tema de la película “A Star in Born” que protagonizó con Cooper.
El semblante de la artista fue el inicio de lo que venía. Visiblemente molesta, contestó, al grito que preguntaba por su compañero de rodaje, con un “Sean amables o jódanse”.
Los aplausos rompieron con el incómodo momento, pero el video se viralizó poco después, debido a los últimos acontecimientos que involucran a Gaga en la ruptura de Cooper y Shayk
Y es que, desde que la cantante y el actor compartieron set durante el rodaje de la película, vino toda una suerte de publicidad desde la misma audiencia, que elevó la química a una posible relación entre ambos, poniendo en duda la estabilidad de la pareja que Cooper conformaba con la modelo rusa.
La situación se volvió más compleja en la anterior ceremonia de los premios Oscar, cuando Gaga y Bradley, interpretaron el tema de su película y las redes sociales estallaron no solo en halagos por su química, sino, por señalar la supuesta incomodidad de Irina, ante la forma en que Gaga y Bradley se entregaron en el escenario.
Sin embargo, revistas especializadas en el mundo del espectáculo, han citado recientemente a allegados a Irina y el actor, asegurando que éste no se atrevería a llevar a cabo una nueva relación con la cantante, por respeto a la madre de su hija. Así lo informa también el medio británico The Sun.
