Este lunes se celebró una nueva versión de la gala MET, evento que reúne a las celebridades bajo un concepto artístico que reflejan en sus vestuarios: en esta versión fue el turno del estilo Camp.
Como cada año, la familia Kardashian-Jenner llegó hasta la alfombra roja del Museo Metropolitano de Arte en Nueva York para mostrar sus “looks”, pretendiendo dejar su huella en los eventos de moda.
Es así como Kris Jenner (63) asistió al lugar con su novio, Corey Gamble, y gran parte de su familia: sus hijas menores Kendall y Kylie, sus yernos Travis Scott y Kanye West, y -por supuesto- su hija Kim Karashian.
Al parecer, la empresaria quiso “mimetizarse” con sus retoñas y dejó atrás su característico pelo corto castaño para lucir una melena lisa y platinada, tal como lo hace Khloé y como lo han hecho Kim y Kylie en otras oportunidades.
Según contó su estilista a la revista de moda Allure, Jorge Serrano, la matriarca decidió que quería lucir rubia sólo dos horas antes del evento. Es así como elaboró exclusivamente para ella la peluca asimétrica bañada en aceites para generar una apariencia natural. “Me costó mucho encontrar el tono correcto de rubio”, admitió.
Jenner además usó un “enterito” de Tommy Hilfiger y un prominente abrigo blanco.
