No cabe duda que los cambios de vida y rutina para Meghan Markle, actual Duquesa de Sussex, han sido notorios desde que se convirtió en esposa del Príncipe Harry. A las prohibiciones para viajar con frecuencia y mantener redes sociales se sumo otra: no puede consumir más pastas, mariscos, ni ajo; sus alimentos favoritos.
Así es, según estipula el exChef Real Darren McGrady, que administró el menú en Buckingham Palace, estos tres alimentos están prohibidos por la propia monarca de Reino Unido, Isabel II.
En conversación con la revista inglesa Business Insider, McGrady indicó que la prohibición del ajo está basada en que los miembros de la Familia Real deben mantener un buen aliento, por todas las visitas y encuentros que deben sostener.
“Nunca podemos servir nada con ajo o demasiadas cebollas. La Reina nunca tendría ajo en el menú”, sostuvo el chef.
Este protocolo también hace relación a las visitas que hacen los miembros de la realeza al extranjero, donde también están impedidos de comer mariscos.
La explicación a esta medida se basa en que, según Darren, existe un alto riesgo de intoxicación por estos alimentos, por lo que se exige que no sean consumidos para evitar enfermedades.
Por último, las pastas también están fuera de la dieta en las dependencias reales. “Estas tampoco aparecen en el menú porque la prohibición de carbohidratos es una elección personal de la reina Isabel, quien evita las comidas con almidón”, explicó el profesional.
En 2013, la propia Meghan había señalado, en una entrevista con el medio estadounidense The New Potato, que su plato preferido en la cena era pasta con mariscos.
En fin, para ser parte de la Familia Real Británica también hay que hacer sacrificios. Por el momento, la Duquesa de Sussex se ha mantenido estoica en su postura.
