Durante la semana pasada comenzaron a circular rumores que Blake Lively y Ryan Reynolds estarían teniendo problemas en su matrimonio debido a las apretadas agendas de ambos.

El tema fue abordado por el diario International Business Times, quienes citando a una fuente anónima de la revista OK, afirmaban que la pareja no encontraba tiempo para pasar “tiempo de calidad” juntos.

“En los últimos años, Ryan ha estado trabajando fuera de la ciudad mientras Blake se queda en casa con los niños. La distancia entre ellos les ha pasado la cuenta”, agregó la fuente.

El artículo llegó a manos del protagonista de Deadpool, quien respondió en su clásico sentido del humor. “Desearía poder usar un poco de ‘tiempo para mi"”, escribió en su cuenta de Twitter.

Pero más allá de las bromas, la pareja se ha convertido en una de las más estables de Hollywood. “Mi esposo y yo no trabajamos al mismo tiempo, entonces -cuando uno tiene que viajar a filmar- vamos todos juntos como una familia. Si estamos lejos como familia, nunca es más que por un día”, aseguró Lively hace un tiempo a la revista People.

Blake presentó a su hija

Pero no sólo por rumores hizo noticia la actriz. Este domingo, Blake fue fotografiada junto a su pequeña hija James, quien es una mezcla perfecta de sus padres.

La niña de tres años y la actriz llegaron a Bedford, Nueva York, para participar en una fiesta de Pascua organizada por Martha Stewart.