Una de las grandes banderas de lucha del príncipe William es la salud mental de las personas, de hecho, su sueño es que Inglaterra pueda abrirse al tema y conversarlo en voz alta.
Para ello se convirtió en uno de los rostros visibles de la organización Heads Together que busca crear conciencia sobre la importancia de la salud mental en los más jóvenes.
En este contexto, el duque de Cambridge concedió una sincera entrevista a la revista GQ, donde no sólo habló de su propia experiencia sino que también se sinceró sobre la muerte de su madre, la princesa Diana de Gales, un tema del que nunca había querido hablar públicamente.
“Me gustaría tener su consejo, me hubiese encantado que conociera a Kate y que hubiese visto crecer a los niños, me entristece que no lo haga, que ellos nunca la conocerán“, confesó.
Pero asegura que hoy se encuentra mucho mejor para enfrentar el tema. “Estoy en un lugar mucho mejor del que había estado en mucho tiempo. Estoy en un lugar donde puedo hablar de ella más abiertamente, hablar de con más honestidad, recordarla mejor y hablar sobre ella mejor públicamente”, agregó.
“Me tomó casi 20 años llegar aquí. Todavía es difícil para mí porque aquel momento fue muy rudo“, explicó. “No es como el duelo del resto, porque aquí todo el mundo sabía, todo el mundo conocía la historia, todo el mundo la conocía a ella. Es una situación diferente, porque para la mayoría, cuando pierden a alguien que aman, pueden decidir esconderlo o contarlo“.
Recordemos que hace algunos meses el príncipe Harry reconoció que vivió un periodo de “caos total” antes de atreverse a buscar ayuda para superar la muerte de su madre.
El príncipe de 32 años contó al diario The Telegraph que pasó años intentando ignorar sus emociones. “Mi forma de lidiar con esto era meter la cabeza en la arena, negándome a pensar en mi mamá, porque pensaba: ¿En qué me puede ayudar? Esto sólo me va a poner triste. No va a traerla de vuelta”, contó.
Su familia
Una gran ayuda para comenzar a superar su pena ha sido su esposa y sus dos hijos, George y Charlotte. “No podría hacer mi trabajo sin la estabilidad de la familia. La estabilidad en casa es muy importante para mí. Quiero criar a mis hijos en un mundo feliz, estable y seguro, eso es muy importante para nosotros como sus padres“, confesó.
“Quiero que George crezca en un ambiente verdadero, vivo, no quiero que crezca detrás de las paredes de un palacio, él tiene que estar ahí afuera, pero los medios hacen más difícil que ellos tengan una vida normal”.
Recordemos que este 2017 se cumplen 20 años de la muerte de la princesa Diana, quien falleció en un trágico accidente de autos en Paris.
