En noviembre del año pasado, el portal de noticias de entretención TMZ filtró un video privado donde aparece Jared Leto escuchando un disco de Taylor Swfit. 

En las imágenes, el también músico analiza junto a dos amigos -que no aparecen en cámara- algunas canciones del disco 1989 de la famosa artista, pero al parecer ninguna lo convence.

Oh, no me gusta eso para nada. La próxima…“, dice Leto al inicio del clip que dura poco más de un minuto. Sin embargo, la peor parte es donde dice, en no muy buenos términos, que no le interesa para nada Swift.

“La verdad, que se pudra, ella me importa una mierda. Es lo que funciona mejor para nosotros”, exclama Leto.

La filtración del video indignó al actor y lo llevó a interponer una demanda contra el sitio de noticias. “Seamos claros. Este es un material robado. Es una invasión a mi privacidad. Y es moral y legalmente cuestionable”, señaló en diciembre del año pasado en una declaración.

10 meses después, la justicia norteamericana dictó sentencia a favor de TMZ. Según el jurado, las imágenes nunca pertenecieron a Leto y además la licencia fue vendida al medio por la persona que captó el video. 

El camarógrafo era un amigo de Leto, Naeem Munaf, quien se comunicó con TMZ bajo el seudónimo de Jake Miller.

La justicia argumentó que no existían pruebas escritas que  el material de Munaf perteneciera a Jared o que el hombre estuviera trabajando para él.

“Munaf usó su propio equipo y sólo él operó ese equipo durante la grabación del video”, señaló el juez a cargo de la causa. “Munaf no firmó ningún acuerdo antes de la grabación“, agregó.