Desde este mes, al igual que como todos los años en septiembre, la “Tía Rica” se encuentra ofreciendo una promoción que busca ayudar a las familias que, producto de las festividades, incrementan sus gastos.
De esta manera, según informó el seremi del Trabajo y Previsión Social, Patricio Sánez, desde este mes hasta el 31 de diciembre, la Dirección del Crédito Prendario (Dicrep) aumentó el precio de la tasación por gramo de oro de 18 quilates de $10.500 a $11.500.
Esto se traduce en “un incremento equivalente a un 9,5%, manteniendo las mismas condiciones que hacen de Dicrep una alternativa oportuna de financiamiento especialmente para las personas más vulnerables”, explicó Sáenz.
La autoridad además explicó que los usuarios de la “Tía Rica” cuentan con un plazo de seis meses para pagar, el cual se puede renovar por otro período similar de tiempo, por una única vez.
A esto agregó que “esta medida busca apoyar a quienes deseen celebrar un nuevo cumpleaños de nuestro país y las fiestas de fin de año, dándoles una alternativa real muy conveniente para que no deban recurrir a otras fuentes de financiamiento, cuyas condiciones son en la mayoría de los casos muy desfavorables”.
¿Cómo obtengo un préstamo?
La persona sólo debe ser mayor de 18 años, presentar su cédula de identidad vigente y llevar una especie, que para efectos de esta promoción, se trate de una alhaja de oro de 18 quilates para dejar en garantía. No es necesario acreditar antecedentes comerciales, ni laborales.
Por su parte, el administrador regional de la entidad, Claudio Cárcamo indicó que “el mejoramiento permanente de nuestro crédito forma parte de uno de los objetivos estratégicos que nos hemos puesto como institución, con especial atención y ayuda a las personas con dificultad para acceder al crédito tradicional que pertenecen a los quintiles II, III y IV y enfatizando el rol social de Dicrep, a través de una relación transparente, cercana y de confianza con la ciudadanía”.
De cada diez personas que acuden a Dicrep, cuatro utilizan el dinero que les entrega la institución para pagar servicios básicos como agua, luz y gas; tres lo usan para cumplir con distintos compromisos comerciales, para comprar alimentos y el resto para fines diversos, como costear la movilización o la salud.