Enel Chile compromete la reducción del 64% de sus emisiones directas de Co2 para el año 2023. Esto, respecto a lo generado por sus operaciones de generación en 2017.

Esta estrategia se sostiene gracias al plan de cierre de todas sus unidades a carbón y a la inversión en energías renovables, mediante la cual agregará 2,4 GW de capacidad instalada, provenientes de fuentes eólicas, solares, geotérmicas e hídricas al año 2023. Más de 1,3 GW están actualmente en construcción.

El 31 de diciembre pasado desconectó definitivamente la unidad 1 del complejo Bocamina, mientras que la unidad 2 dejará de operar en mayo de 2022.

Con este compromiso, Enel Chile se convierte en la primera empresa eléctrica chilena en aplicar un plan de reducción de emisiones directas de CO2 en sus operaciones de generación, y una de las primeras dentro del IPSA, en considerar y ejecutar un plan de este tipo dentro de su estrategia.

“Seguimos con nuestro plan de descontaminar la matriz de generación e impulsar el uso siempre más eficiente y limpio de la energía. Estamos liderando la transición energética con la determinación y la inversión necesaria para contribuir a las metas nacionales en materia ambiental y social, y responder al compromiso con nuestros accionistas”, declaró el gerente general de Enel Chile, Paolo Pallotti.