El empresario Andrónico Luksic expresó su preocupación por el complejo escenario que atraviesa Chile desde el estallido social, el cual se acrecentó con la llegada del coronavirus.

En la memoria anual de la Compañía de Cervecerías Unidas (CCU), que fue publicada durante las últimas horas, Luksic abordó los hitos comerciales y estratégicos de la firma durante el último período; y utilizó algunas líneas para referirse a la contingencia.

“Desde el 18 de octubre, hemos convivido con dos fenómenos de alta complejidad. Por una parte, una violencia inusitada en las calles, con víctimas, saqueos, incendios y ataques que no han podido ser controlados por las instituciones del Estado; y, por otra, la manifestación de una serie de demandas sociales de largo aliento (…)”, expresó en el texto.

Sobre estas últimas, señaló que “llevaban años incubándose sin respuesta oportuna” y que, finalmente, han cobrado “máxima urgencia, como las pensiones, los salarios, el transporte público o el acceso a la salud”.

Luksic opinó que el progreso humano y económico que Chile experimentó en las últimas décadas “es indudable”, pero admitió que al mismo tiempo “es evidente que hubo lentitud para atender necesidades que llevan largo tiempo esperando solución”.

Por lo anterior, planteó que se debe erradicar la violencia para atender las reales demandas sociales. “Esto requiere, también, que superemos con urgencia la fragilidad institucional (…) y que la economía del país recupere el rumbo y genere los recursos necesarios para avanzar”, redactó en la memoria anual de CCU.

Seguidamente, el empresario sostuvo que las empresas son parte de la sociedad y que “no están ajenas a esta problemática”.

Por último, respecto al avance y secuelas del Covid-19, Luksic detalló que la compañía fijó dos prioridades: proteger a las personas y asegurar la continuidad de las operaciones, tomando exigentes medidas de resguardo.