Como un absoluto misterio. De esa manera ha quedado plasmado el cierre del Supermercado Capponi, ubicado en la esquina de avenida Los Carrera y calle Caupolicán en Concepción.

En la actualidad, el espacio permanece completamente vacío, con sus cortinas metálicas cerradas y en una especie de abandono por parte de sus propietarios.

Una de las características que marcó al que fuese en su momento un emblemático recinto comercial, fue la preferencia para comprar allí por parte de habitantes de sectores rurales cercanos a Concepción, así como sus góndolas de gran tamaño y su aspecto “clásico”.

BioBioChile se comunicó con Mario Capponi, integrante de la familia propietaria del supermercado, con el objetivo de consultarle sobre cuánto tiempo llevaba cerrado el local, además de saber si el espacio sería destinado a otro tipo de emprendimiento.

Sin embargo, se limitó a señalar que su familia no tenía nada que ver con el recinto (pese a que el apellido es parte de su nombre), y que otras personas están encargadas de revisar su situación.

De acuerdo a lo sostenido por el Diario Concepción, una posibilidad se centra en la posible instalación de un “mall chino”.

Asimismo, fuentes de BioBioChile señalaron que la familia Capponi compró varias propiedades de la cuadra aledaña donde se encontraba el supermercado, las que que se encuentran actualmente con viviendas o negocios en funcionamiento, a los que no se les ha entregado todavía un contrato de arriendo, en una situación que no ha sido regularizada.

Seguidilla de cierres

Si bien la fecha de cese del Supermercado Capponi no se especificó, su situación se suma a la seguidilla de cierre de locales o empresas en la capital de la región del Bío Bío.

Ejemplo de aquello es el periódico Mejores Datos, publicación que no volverá a distribuir en su versión impresa y sólo se mantendrá su versión online.

Otro de los grandes “golpes” para locales emblemáticos de Concepción fue el cierre de Moda Kiss, tienda dedicada a la alta costura y que cerró sus puertas tras seis décadas de historia.

Suerte similar corrió Albano, empresa que el 13 de noviembre decretó el cierre de su fábrica tras 43 años de funcionamiento.

Volviendo a diciembre, fue la tradicional pastelería Sauré Roeckel la que anunció el cierre de todos sus locales en el Gran Concepción.