Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el principal problema del uso indebido de antibióticos en productos alimenticios es la propagación de la resistencia bacteriana que dificulta la acción de los antimicrobianos.

En el caso de la crianza industrial de salmones, se usan grandes cantidades de antibióticos, generando con ello además resistencia en el medio ambiente.

Es por estos motivos que la Asociación de la Industria del Salmón de Chile (SalmonChile), a través de su Tercer Informe de Sustentabilidad, destacó que el uso de antibióticos en la industria salmonera bajó en 2017 a su nivel más bajo en 5 años.

Según sus cifras, publicadas por Economía y Negocios, la aplicación de medicamentos en la industria cayó un 16% en comparación con 2016, y se redujo a 455 gramos por tonelada de salmón producida.

Destacan este logro puesto que, según sus datos, las cosechas registradas durante el 2017 se incrementaron en un 17%, alcanzando un total de 791.103 toneladas de salmón.

Además, desde SalmónChile aseguran que los productos usados por sus empresas asociadas están fuera de la lista de fármacos críticos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para consumo humano.

También defendieron que se aplican los antibióticos bajo estrictos estándares internos e internacionales, con la finalidad de prevenir que queden rastros de los medicamentos cuando el producto llega a los puntos de venta.

Según la asociación, un 96% de los antibióticos usados en la industria se aplican en la etapa de engorda en mar, dirigidos en un 92% a evitar infecciones por una enfermedad bacteriana que provoca importantes pérdidas a la producción chilena.

El presidente de SalmonChile, Arturo Clément, acusó que “existe mucha mitología en torno al uso de antibióticos, alguna de ella derechamente malintencionada”.

“He escuchado muchas veces que se nos ataca, diciendo que en Noruega no usan antibióticos, lo que es una verdad a medias: no los usan porque tienen otros tipos de enfermedades y, en consecuencia, ellos usan medicamentos que en Chile no utilizamos, porque no tenemos esas enfermedades”.