Tras un primer acercamiento conjunto de la Direction Général de l’Alimentation y del Service Régional de l’Alimentation de Francia y luego de un trabajo de análisis de antecedentes agronómicos, fitosanitarios, cuarentenarios y de diagnóstico, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) autorizó al Centro Técnico Interprofesional de Frutas y Hortalizas CTIFL Lanxade a exportar ramillas frutales a Chile sin cuarentena.

Es así como el país de Emmanuel Macron comenzará a enviar patillas de damasco, cerezo silvestre, guindo, almendro, ciruelo europeo, ciruelo japonés (o chino) y dos clases de durazno, confirmó el Ministerio de Agricultura a través de un comunicado.

El proceso contó con visitas de expertos chilenos a suelo galo para conocer la procedencia del material y con el objetivo de “establecer que los procesos de producción y bioseguridad, los métodos de diagnóstico y de certificación desarrollados fueran confiables y seguros“, precisaron en el escrito.

“La ventaja de contar con un centro de producción extranjero que se encuentre reconocido por el SAG es que el proceso para la importación del material de propagación es mucho más rápido, ya que el material queda de inmediato a disposición del importador, evitando quedar bajo el control del Servicio por periodos de cuarentena que pueden llegar a extenderse por dos años como mínimo“, indicó el jefe de la División de Protección Agrícola y Forestal del SAG, Rodrigo Astete.

La gerente general de la Asociación de Viveros de Chile, Maritrini Lapuente, agradeció el trabajo conjunto y la disposición del SAG, asegurando que para los integrantes de su agrupación se hace cada vez más necesario incorporar “de forma segura nueva y mejor genética”

Por su parte, el presidente de Viveros de Chile, Jorge Valenzuela, dijo estar satisfecho con la medida y agradeció la gestión del SAG en el proceso.

“Es un hito para la industria que materiales de carozos puedan ingresar de forma tan expedita desde Francia a nuestro país, pudiendo quedar a disposición de los productores”, añadió.