La marca de alimentos Evercrisp presentó una demanda contra el Fisco, con el objetivo de anular una resolución de la Seremi de Salud que le prohibió utilizar a dos de sus más populares personajes asociados a sus productos: los felinos del “Gatolate” y de los “Cheetos”.

Lo anterior ocurrió por las normativas que establece la Ley de Etiquetados.

En ese contexto, la firma -según consignó Diario Financiero– acusó que se aplicó “una interpretación extensiva e ilegal” de dicha normativa, argumentando que los personajes que aparecen en esos envases cumplen la función de distinguir al producto de sus competidores y que el uso de esas imágenes en el mercado “no es publicitario”.

La seremi de Salud abrió un sumario contra Evercrisp en 2016 y la sentencia se conoció en abril pasado. Para evitar el retiro del mercado de ambos productos, la empresa acató ciertas normas. No obstante, subrayó que las marcas están registradas y que desde la vigencia del estatuto no han usado a los personajes en medios masivos.

“La seremi simplemente miró el tipo de figuras contenidas en los empaques de los productos para calificarlas como atractivas para los menores y concluir por ello que son publicidad”, señalaron desde la empresa, añadiendo que para ellos se trató de un “acto arbitrario e ilegal” por parte de la autoridad regulatoria.