La ONG ecologista Greenpeace anunció el viernes haber sido multada por la justicia británica con 80.000 libras esterlinas por bloquear en 2019 una plataforma petrolera de BP en el mar del Norte, dirigida por la empresa Transocean, que les demandó.

Los activistas, que llegaron a subir a la plataforma en alta mar, perturbaron durante varios días en junio de 2019 su desplazamiento, obligando a BP a cambiar su ruta para llegar hasta el campo petrolífero de Vorlich.

Un tribunal de Edimburgo, en Escocia, dictaminó que la ONG violó su prohibición de bloquear la plataforma, informó Greenpeace en un comunicado, precisando haber sido multada con 80.000 libras (unos 80 millones de pesos chilenos) y obligada a reembolsar los gastos legales de Transocean.

Sin embargo, en contra de lo que pedía el operador de la plataforma, el director ejecutivo de Greenpeace UK, John Sauven, no fue condenado a la cárcel.

“Estamos decepcionados de que Transocean (…) haya intentado castigarnos por intentar proteger el planeta”, dijo Sauven.

“Pero nuestra campaña no termina aquí y seguiremos luchando para evitar que la industria petrolera arruine el clima”, afirmó citado en el comunicado.

La organización ecologista y el gigante petrolero británico tienen otra batalla en los juzgados.

Greenpeace logró en abril que el gobierno británico fuera obligado a publicar un permiso de perforación concedido a BP en el mar del Norte. Dicha publicación permitirá a la ONG solicitar su cancelación por criterios medioambientales.

El objetivo de BP es extraer 30 millones de barriles de petróleo en Vorlich, un sitio offshore a unos 240 km al este de la ciudad de Aberdeen en la costa escocesa.

La producción podría ser de hasta 20.000 barriles de crudo por día y el costo del proyecto es de 200 millones de libras.