Un alto temor a contagiarse con coronavirus viven las personas de menores ingresos, según reveló un estudio realizado por investigadores del Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI).

Se trata de una encuesta realizada por académicos de la Universidad de Chile, la PUC y de la Universidad de Concepción ligados al ISCI, sobre los efectos de la pandemia coronavirus COVID-19 en viajes, actividades, preocupaciones de las personas y opiniones.

“¿Le preocupa ser contagiado por el coronavirus? ¿tiene temor de perder su trabajo o fuente de ingresos por la crisis? ¿teme por la salud de sus familiares en los grupos de riesgo?”, fueron algunas de las preguntas incluidas en una encuesta respondida por más de 4 mil personas (4.395) de la región Metropolitana, Valparaíso y Concepción.

Entre los datos más relevantes aparecen algunas preocupaciones transversales, como por ejemplo la posibilidad de que un ser querido se contagie, que el sistema hospitalario colapse y el contagio de los adultos mayores.

preocupaciones

Sin embargo, también destaca la preocupación de las personas de menores ingresos ante los posibles efectos económicos de la pandemia en sus familias, como perder el trabajo y no ser capaces de pagar deudas.

De acuerdo a los datos, tras la suspensión de clases, hubo una reducción de un 44% en todos los modos de viajes. Sin embargo, esta disminución a su vez expuso la desigualdad de acuerdo al grupo socioeconómico, pues, mientras el 76% a 78% de los encuestados con ingresos menores a $600 mil se siguió desplazando para trabajar, entre un 73% a 80% de los hogares por sobre el $1,5 millón hizo teletrabajo.

En palabras simples, tres de cada cuatro personas de bajos ingresos tuvieron que salir a trabajar.

teletrabajo

Esto explicaría entonces el temor de las personas con menores ingresos, quienes deben seguir moviéndose, principalmente en el transporte público, a diferencia de los grupos con mayores ingresos, quienes pueden usar sus vehículos particulares o en casos extremos, trasladarse en helicópteros.

De igual forma, resalta la inquietud respecto a la libertad de movimiento, en donde nuevamente los sectores con menores ingresos muestran una mayor aprensión respecto a realizar actividades económicas fuera del hogar.

En línea con todo lo anterior, los sectores más desposeídos muestran su preocupación por contagiarse de coronavirus, posiblemente por la mayor exposición en sus trabajos, posible peor estado de salud y el peor acceso al sistema, el hacinamiento en sus hogares, y los efectos económicos adversos, según destacan los investigadores.

pincipal

Uno de los responsables del estudio, el académico de la Universidad de Concepción, Sebastián Astroza, aseguró que lo más importante que evidencia la encuesta, es el temor de los sectores de menos recursos.

“Lo que nosotros creemos que fue lo más chocante, era el hecho que las personas que vivían en hogares de bajos ingresos son los que están más preocupados de contagiarse de coronavirus”, aseguró a BioBioChile.

“Obviamente esperábamos que las personas de menos ingresos tuviera más preocupados de las deudas, de perder el trabajo, pero este hecho de que además estuvieran más preocupados de contagiarse mucho más de los de altos ingresos, es algo que no era tan evidente”, agregó.

En ese sentido, el estudio en cierta forma ha expuesto el comportamiento de un sector de la población.

“Yo creo que lo que sale en la prensa se ha evidenciado un poco. Hay gente que sale porque tiene que salir, porque tiene que comer, y hay otra gente que sale porque simplemente no les importa y creo que la encuesta logró definir bien estos perfiles de personas”, sentenció.

“La gente de bajos ingresos está preocupada de contagiarse porque tiene que salir, se tiene que exponer”, explicó Astroza.

Por lo mismo, los investigadores apuntan a la necesidad de establecer otras medidas en paralelo a una eventual cuarentena. Ahí aparecen como opciones asegurar una renta básica a quienes no tienen ingresos asegurados, como los trabajadores informales, quienes no tienen seguro de cesantía.

Así también, es necesario proveer los medios a los sectores más modestos, como por ejemplo que el Estado les entregue mascarillas para circular en el transporte público, dado el alto costo que está alcanzando este elemento en el mercado.

La encuesta fue realizada por los académicos Alejandro Tirachini, Sebastián Astroza, Juan Antonio Carrasco, Ricardo Hurtubia, Angelo Guevara y Marcela Munizaga, y consideró las actividades de las personas la semana del 9 al 15 de marzo (previo a la aplicación de medidas por COVID-19) y entre el lunes 16 y el domingo 22 de marzo (post suspensión de clases y durante la transición a teletrabajo en algunos rubros laborales).

El objetivo es realizar una segunda etapa durante una eventual cuarentena total, para recopilar datos útiles en la creación de políticas públicas. Como también medir el impacto una vez que se supere la pandemia.