Puede parecer una broma, pero las frutas y verduras que son cultivadas aquí en nuestro país pueden llegar a costar menos en otras naciones que en Chile; desde la amada palta, pasando por duraznos, plátanos o arándanos, los precios pueden llegar a tener diferencias de hasta $3.000 en un kilo.

El ejemplo más emblemático es el de los arándanos y duraznos, consigna diario La Segunda.

En Nueva York, Estados Unidos, el kilo de arándanos cuesta $7.600. En Londres, Inglaterra, llega a $8.320 el kilo, mientras que en Chile puede llegar a costar más de $10.000 en Jumbo o $8.720 en Líder.

De cerca le siguen los duraznos.

Un kilo de duraznos nectarines en Londres cuestan cerca de $1.250, mientras que en Chile puede llegar a costar $1.790 en Jumbo o 1.590 en Líder.

Diferencias en dos frutas que no dejan de llamar la atención, pero que se repite en otros casos como el de la palta, aunque de forma más leve y donde los precios pueden llegar a ser equivalente.

Así lo explica el chileno Roberto Puente, quien vive en Bremen, Alemania, y Marcelo Esquivel en Londres.

“Acá una palta vale un euro ($738) y un kilo de uva, en la época más barata, dos euros ($1.476), y en la más cara hasta 3 euros”, dice Puente.

Mientras Esquivel asegura que la palta grande tiene un precio cercano a la libra o $800.

Si se considera que un kilo está compuesto entre 3 a 4 paltas y que en Líder este cuesta $3.490, el precio promedio no es tan distintos al local: $2.214 a 2.952 en Alemania y $2.400 a 3.200 en Londres.

Existe explicación

Según el ingeniero agroindustrial Luis Ponce asegura que esta es una situación que ha ocurrido siempre.

“La fruta chilena que se vende en el extranjero es de mejor calidad y más barata que en el mercado local”, precisa.

Pero esta opinión no es compartida por todos los actores del sector.

“Puede ser que haya momentos y circunstancias en que un mercado se ha visto atochado de frutas y los precios hayan bajado, pero en general yo diría que la fruta es bastante más cara afuera que adentro”, dice Luis Schmidt, presidente de la Federación de Productores de Fruta de Chile (Fedefruta).

Y otros son más radicales: “Pagué el equivalente a $1.800 por tres duraznos chicos. No es más barato allá, lo que pasa es que los chilenos siempre se quejan”, sentencia Arturo Guerrero, relacionador público de La Vega Central quien pasó por Italia.