Desde Cincinnati hasta Nueva York, la deportista chilena de 19 años y número uno del ranking nacional de paratenis, Martina Siebert, sigue abriendo camino en los escenarios más importantes del deporte mundial.
Martina -que padece el Síndrome de TAR- fue una de las primeras mujeres de la categoría en competir en esta disciplina en un Grand Slam, alcanzando resultados históricos en dos de los torneos más importantes, como son Cincinnati y el US Open.
En agosto, Martina vivió una experiencia única al ser la única jugadora no estadounidense invitada a la exhibición oficial de paratenis en el Cincinnati Open, uno de los torneos más destacados del circuito ATP Masters 1000. Además, participó en el Cincinnati Tennis Foundation ParaStanding Championships, donde alcanzó las semifinales en individuales mixtos y se consagró campeona en dobles mixtos junto al estadounidense Sam Shnowske.
El gran momento llegó hace una semana, cuando el US Open, bajo el lema “Be Open”, celebró la primera edición del Parasanding Tennis Invitational.
El torneo reunió a 16 jugadores de ocho países y abrió por primera vez la competencia a mujeres. En ese escenario, Martina brilló en la modalidad round robin al quedarse con el vicecampeonato femenino, consolidándose como referente internacional de la disciplina. También participó en dobles junto al chileno Nicolás Basáez y, aunque no lograron avanzar, demostraron el nivel competitivo del paratenis nacional.
“Competir en escenarios como Cincinnati y el US Open es un sueño hecho realidad. Son torneos de primer nivel, con un público enorme. Poder haber jugado ahí demuestra que nuestra disciplina tiene un lugar en el tenis mundial. Estos resultados me motivan a seguir trabajando para llegar aún más lejos”, concluyó Martina.