Si hay algo que resalta en la carrera de Juan Martín Del Potro, además de sus grandes batallas con los mejores tenistas de la historia como Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic, es su capacidad para reponerse a las adversidades que le plantearon distintas lesiones a lo largo de su extenso recorrido, antes por la muñeca y ahora por la rodilla, por la que ya lleva un año fuera de las canchas.
Fue exactamente el 19 de junio de 2019 el día que el tandilense eliminó a Denis Shapovalov en su debut en el ATP 500 de Queen’s. Pero la alegría del triunfo quedó opacada por la preocupación tras un resbalón que le generó un fuerte dolor en su rodilla derecha.
Luego, horas más tarde, una resonancia magnética convertiría esa preocupación en mucha tristeza al confirmarse una fractura en la rótula que lo obligaba a entrar una vez más al quirófano.
Desde aquel día fueron varios los intentos del campeón de la Copa Davis en 2016 por regresar a las canchas. En un principio, la fecha estipulada era octubre de 2019 en la gira indoor europea pero no llegó a tiempo con la rehabilitación y poco tiempo después también debió cancelar la exhibición con Roger Federer en Argentina.
Ahora, en medio de la pandemia, ‘Delpo’ sueña con demostrar una vez más su enorme poder de resiliencia pero, como le pasa a cualquier deportista y a cualquier persona, hay días que los padece y así lo graficó en una entrevista con Alejandro Fantino para ESPN.
“Me hace renegar la rodilla. Tengo días mejores y otros que me siento un señor grande y ya tengo charlas. La otra vez me puse a hablar con la abuela de un amigo y teníamos los mismos síntomas, te lo juro”, partió contando Del Potro.
“Hay veces que molesta, típico dolor cuando subes una escalera o cuando cargas un poco de peso o la humedad. Pero como ya dije, son dolores que le voy a encontrar la vuelta para por lo menos volver y tratar de cerrar, cuando sea que tenga que cerrar de la manera que siento que me merezco”, cerró el tenista de 31 años.
