El extenista nacional, Marcelo Ríos, se refirió a su ausencia en el equipo de Copa Davis para la serie que se disputó ante Argentina en San Juan por la final del Grupo I de la Zona Americana.

“No fui por un tema personal. Obviamente me hubiera encantado estar y que me gritaran cosas. Creo que hay una rivalidad. Los tuiteos que tiré no los tiré en mala onda, pero la gente los pesca así. Yo calenté la cuestión, pero en una onda deportiva. Sabíamos que Chile le ganó a Argentina en el fútbol, están picados. Siempre hay una rivalidad, pero me molesta que el chileno no me apoye y se tire contra mí. Dije que les íbamos a romper el culo, pero en Argentina se habla así. Veo los programas deportivos argentinos y se agarran a chuchadas, se tratan de hijo de puta. En Chile uno dice eso y queda como garabatero. Una vez dije que yo era uno y Vilas había sido dos. Entonces, dejemos tranquilo al viejito. Pero son cosas chistosas, no son graves”, dijo en entrevista con La Tercera.

Consultado por su permanencia en el equipo de Copa Davis, el ‘chino’ aclaró que seguirá siendo parte del grupo. “Me ausenté, pero sigo”.

“Quería ir a Argentina. Pero ya no me mando solo, tengo familia, tengo señora y es un siete conmigo. Tengo un papá bastante inteligente. No me manda, pero me guía. Obviamente las decisiones son mías. Tengo 42 años y decidí dejar pasar ésta porque tenía problemas personales que arreglar. Estuve hasta el último día a punto de viajar. Me sentí respaldado por ciertas personas, pero no por todos. Pero no en mala onda. Es como cuando te contrata un canal y no puedes decir lo que quieres. Siempre he puesto el ejemplo de Camiroaga, que me caía la raja. Cuando conversaba con él, me decía “nunca te voy a hacer mierda”. No dependo de nadie y puedo hacer lo que quiera. No tengo parámetro. La que me puede retar es mi señora, como lo hizo cuando dije “chúpala”. Pero más que eso, nadie, agregó.

Por otro lado, el exnúmero uno del mundo tuvo palabras para la polémica que ocurre en la Federación de Tenis y su relación con el expresidente José Hinzpeter.

“Lo pasé tan mal con Hinzpeter… A mí me pagaron lo que me debían, te lo explico y lo voy a dejar más claro que la cresta. Yo no cobraba nada por ir a Copa Davis hasta que pasáramos al Grupo Mundial o jugáramos la pasada. Ahí yo quería recibir un bono, y me dijo “perfecto, ningún problema”. Fueron cuatro Copa Davis para llegar ahí y no cobré nada. Iba, estaba ahí, me sacaba la cresta, dejaba a mi familia, peleaba con mi señora… Igual iba, porque me gustaba, el equipo es un siete. Cuando llegó el momento yo fui a hablar con Hinzpeter y me dijo cosas muy fuertes del equipo, que me llegaron. Le dije: “tú me prometiste algo y cúmplelo”. Luego, llama a Ulises (Cerda) y le dice: “Marcelo renunció a la Copa Davis y va a llamar a Nicolás y al equipo, porque siente que lo pasé a llevar”. No fui a otra Copa Davis, porque dije que mientras estuviera y no se arreglaran los problemas, no iba a apoyar lo que estaba pasando”, cerró.