“Nada más, partido terminado”. Esa frase que tantas veces hemos escuchado, el jueves pasado cobró más sentido que nunca.
Y es que de seguro muchos chilenos pedíamos a gritos que el juez terminara de una vez por todas con el sufrimiento que Ecuador nos provocó en los últimos minutos, y que nos hizo pensar, por un momento, que todo llegaba hasta aquí.
Esto, porque a pesar de que la ‘Roja’ dejó los tres puntos a casa y le devolvió el alma al cuerpo a toda una nación, es innegable que lo ocurrido durante el transcurso del pleito generó alguna duda. “¿Qué pasaría si Chile no clasifica al Mundial?”, me pregunté.
Y no es que yo quiera que la selección no vaya a Rusia. Que no se malinterprete, por favor. No podría pensar jamás que la eliminación serviría para hacer cambios sustanciales en el fútbol chileno. Que quede claro que mi deseo de que Bravo y compañía vayan a la Copa Mundial es tan grande, que a estas alturas me da lo mismo como se consiga la clasificación.
Pese a esto y tal como dice el dicho, “lo cortés no quita lo valiente”, no puedo evitar volver a preguntarme, ¿Y qué pasaría si Chile no clasifica?.
De seguro lo primero que se haría es revisar la continuidad de Juan Antonio Pizzi. Porque es obvio, a alguien hay que responsabilizar.
Luego, posiblemente, volveríamos al lamento por la partida de Marcelo Bielsa y asumiríamos que necesitamos de su sistema de juego porque, evidentemente, el nivel mostrado por los jugadores de la ‘Roja’ no fue el esperado.
Puede que también nos demos cuenta de lo lejos que está el recambio de jugadores. Y cuando digo ‘lejos’, no me refiero solo a la lentitud del proceso, sino que también al talento de estos mismos.
En una de esas nos replanteamos cómo los clubes chilenos han perdido largos años de trabajo sin que un solo proyecto llame la atención. Que tal vez en las divisiones menores hay ‘material’, pero que la temprana venta de los jóvenes es un mala decisión.
Finalmente y aunque suene cómico, me atrevería a decir que aparecería la ‘tía Yoli’, Alejandro Ayún o Vanesa Daroch diciendo que ellos predijeron hace muchísimo tiempo este declive… pero que nadie les creyó.
Yo sinceramente, no sé exactamente qué pasaría si Chile no va al Mundial. A estas alturas de lo que único que estoy segura, es de que hay que aprovechar los dotes de esta generación dorada para después no lamentarse.
