Veníamos tan bien. El martes Unión Española había logrado una sólida clasificación a la Fase 3 de la Copa Libertadores, dejando en el camino a Atlético Cerro. Pero un día después, Colo Colo quedó fuera del torneo tras no poder superar a Botafogo, desatando una ola de críticas generalizadas por lo que ocurrió con el ‘Cacique’.

Es que a diferencia de Unión, que marcó las diferencias ante un cuadro de escaso vuelo futbolístico, los ‘albos’ no pudieron -o no supieron- resolver los problemas que les planteó un equipo brasileño sin mayor brillo, aunque con algunos jugadores de buen nivel. Un análisis que se agrava cuando se considera que un autogol les entregó la ventaja que necesitaban para clasificar.

Quedó la sensación de que Colo Colo no supo qué hacer por el resto del partido. Era cosa de ver los erráticos movimientos del cuadro albo en el segundo tiempo, cuando la ventaja les pertenecía y necesitaban sólo manejar el juego. Parecían atemorizados y paralizados, quizás por los recuerdos de las anteriores eliminaciones en el Estadio Monumental, tanto que era cosa de tiempo que llegara el empate, como pasó en el minuto 81 con el tanto de Pimpao. Ni siquiera se llevaron por delante al rival en busca del gol del triunfo, limitándose a intentar rotar el balón buscando un espacio dificíl de encontrar.

¿Culpables? Todos. Una dirigencia que habló mucho de apostar por el torneo internacional, pero que no fue capaz de reforzar convenientemente el plantel; los jugadores, muchos de ellos de experiencia, pero que lucieron superados por el temor de una nueva frustración en la cita continental; y el cuerpo técnico encabezado por Pablo Guede, que no fue capaz de implementar un ‘plan B’ consistente en caso de estar en ventaja, porque si un equipo se quiere defender no puede ser sorprendido defendiendo mano a mano como en el tanto visitante.

Los pecados de Colo Colo son varios. Los cuestionamientos a Guede crecen y varios le exigen el título del Clausura para mantener su puesto, mientras se habla de una reformulación del plantel, buscando reducir el promedio de edad. Suficientes temas de discusión que está en veremos que se cumplan, porque en nuestro país es común la dureza en el análisis, pero también la suavidad para llevar a cabo los cambios.