El estonio Ott Tänak (Hyundai), en cabeza desde la mañana, conserva las riendas del Rally de Estonia, cuarta manga del Mundial (WRC) y primera desde mediados de marzo, tras la crisis del COVID-19, al término de la primera jornada de este sábado.
Tanak tomó el mando en el tercer tramo cronometrado de la prueba, la segunda de la jornada, y precede en la general de la prueba a su compañero irlandés Craig Breen en 11 segundos y 7 décimas, y al francés Sébastien Ogier (Toyota), líder de la clasificación del Mundial, en 28,7.
El dominio del piloto local no sorprende, sabiendo que se ha impuesto en tres ocasiones, en 2014, 2018 y 2019, en la prueba, disputada a menor nivel desde 2010.
El Rally de Estonia debía entrar en el calendario del WRC en 2021, tras un evento promocional en 2019, pero la pandemia y la necesidad de encontrar nuevos destinos precipitaron esta inscripción.
Problemas para Fernández
Quien tuvo una jornada complicada fue Emilio Fernández. Sobre su Škoda Fabia Evo y junto a su navegante Rubén García, el chileno partió con dificultades en la primera especial del día y, en la segunda, la rotura de la manguera del radiador de agua lo obligó a retirarse, aunque retornará a la competencia del domingo.
“Los mecánicos y los ingenieros de Toksport ya hicieron lo suyo y el auto está listo para reenganchar durante la segunda etapa. Así, yo podré sumar experiencia y kilómetros en este viaje”, analizó Fernández, quien esperaba mejor fortuna para esta carrera dentro de la clase WRC3, en la cual va primero el joven Oliver Solberg (Volkswagen Polo GTI).
“Vamos a intentar hacer la mayor cantidad posible de tramos para llegar bien preparados a Turquía, donde otra vez intentaremos salir con todo”, añadió el chileno.
La última jornada del Rally de Estonia contempla seis pruebas especiales y 84,96 kilómetros cronometrados. Ese recorrido dará término a la carrera número 600 del torneo mundial en su historia y a la fecha de retorno de éste después de casi seis meses de suspensión por la emergencia sanitaria del COVID-19.
