Cada vez más lejos. El retorno de la Fórmula E a nuestro país tras la exitosa edición de febrero de este año en Santiago, se complica con el paso de los días. Primero fue la declaración gubernamental de no apoyar económicamente la competencia, y ahora se han generado una serie de trabas que tienen las negociaciones en ‘punto muerto’.
Así lo confirmó el director general de la carrera, Alberto Longo, en diálogo con La Tercera: “No es un tema económico, sino de principios”, lamentó.
“El martes nos llegó una propuesta en que nos pedían mucho más dinero que el que le piden a cualquier evento por arrendar el Parque O’Higgins. Ahí dije que lo mejor era no venir”, complementó Longo.
Para el miembro de la Fórmula E el tema es claro: “Me demostraron que no nos quieren, que no tenían un excesivo interés en la carrera por parte de Santiago. Sí en hacer caja a costa nuestra”, afirmó.
Y es que realizar el evento otra vez en el Parque forestal ya estaba descartado. Por lo mismo, el Parque O’Higgins asomó como una buena alternativa, aunque -hasta ahora- no se ha concretado.
El tema es que el cobro por utilizar el reciento era tres veces mayor al presupuestado por la compañía. Desde el Municipio de Santiago el tema es claro: si quieren ocupar el espacio, deben pagar lo establecido en la ordenanza N°94.
“Una actividad deportiva con las características de la Fórmula E, con presencia de auspiciadores y marcas, se encuentra sujeta a esta ordenanza y sus respectivos cobros”, explicó en un comunicado la coordinadora de Espacios Públicos, Bernardita Lorenzini, detallando que “el monto por derechos municipales sería similar a lo pagado el año pasado, cercano a los 450 millones de pesos”.
El costo no convence a los organizadores de la Fórmula E. De hecho, se quejan de que es mucho mayor del que se ocupa para Lollapalooza. “Nosotros dejaremos una pista y avances que perdurarán”, lamentan. La carrera comienza a alejarse de Chile, tanto que Santiago no apareció en el calendario oficial de la próxima temporada, pese a que quedó la tercera fecha -previa a México- como ‘libre’. Por mientras, Uruguay y Brasil se pelean por quedarse con el cupo, y los fanáticos nacionales del ‘deporte tuerca’ esperan un milagro.
