Este sábado arrancó una nueva edición del Tour de Francia Femenino y entre las 154 ciclistas que se lanzaron a la ruta, una chilena volvió a decir presente: Catalina Soto.
La pedalera nacional afronta el desafío en un rol de apoyo dentro del equipo, una suerte de ‘peón’ táctico que puede ser clave en las etapas intermedias.
La deportista de 24 años, que ya ha competido en el Giro de Italia y la Vuelta a España, regresa al Tour de Francia Femenino tras finalizar en el puesto 67 en la edición anterior. Este año, fue nuevamente incluida en el septeto titular del equipo vasco Laboral Kutxa.
En la primera etapa, disputada sobre 78,8 kilómetros entre Vannes y Plumeler (Bretaña), Soto cruzó la meta en el puesto 138, a 7 minutos y 47 segundos de la legendaria neerlandesa Marianne Vos, quien se llevó la jornada con un tiempo de 1 hora, 53 minutos y 3 segundos.
La corredora del Visma-Lease a Bike, de 38 años, demostró que su talento sigue intacto. Suma ya tres títulos mundiales en ruta, dos en pista y dos oros olímpicos (Beijing 2008 y Londres 2012).
Para Catalina Soto esta segunda experiencia en el Tour no solo representa un desafío deportivo, sino también un paso más en su consolidación dentro del ciclismo europeo.
El recorrido total de la competición femenina será de 1.168,6 kilómetros. Una prueba de resistencia, estrategia y trabajo en equipo.