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El atleta paralímpico chileno Luis Gutiérrez destacó en el Patagonian International Marathon al completar los 42 kilómetros, siendo ovacionado en su llegada a la meta. Gutiérrez, cegado en servicio en 2009, compartió la experiencia de correr en Magallanes, resaltando la diferencia con sus entrenamientos en Santiago. Agradeció el apoyo del público, destacando la labor de su guía Seba Vega. Ambos se apoyaron mutuamente durante la carrera, destacando la emoción y esfuerzo en esta memorable jornada deportiva.

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Conmovió a todos. El atleta paralímpico chileno Luis Gutiérrez fue uno de los grandes protagonistas del Patagonian International Marathon este sábado 7 de septiembre.

El excarabinero, que resultó cegado en servicio en 2009 por un impacto balístico, completó con éxito la distancia más larga en la región de Magallanes: los 42 kilómetros.

Los últimos metros de Gutiérrez fueron de los más emotivos de la jornada. De hecho, la premiación de la categoría 10k fue interrumpida para que todos se centraran en el arribo del deportista a la meta. Ahí cayó la ovación.

Tras terminar el recorrido, el deportista conversó con BioBioChile y destacó que “fue rica la carrera, muy diferente y lejos de lo que uno entrena diariamente en Santiago”.

En la misma línea, el exuniformado manifestó que “venía trotando y me saqué los lentes para sentir la brisa, las sensaciones de un ciego es distinta. Se disfrutó esta carrera”.

“Hubo de todo un poco, viento a favor, viento en contra, mucha subida, pero feliz porque cruzamos la meta. A eso veníamos. Lo más difícil fueron las subidas y el viento, las sensaciones de nosotros son más agudas, uno se desorienta, pero el apoyo de la gente fue espectacular”

“La gente nos gritaba, nos daba aliento, las bocinas, así que feliz y agradecido de todos los que hacen posible que haya paralímpicos en esta carrera. Agradecido a una gran persona, Pato Vásquez, que nos ayudó con el avión. A Gendarmería de Chile que nos apoyó y a Seba Vega, por su gran labor de guía que cumple. Fue mis ojos estos 42k”, acotó.

Vega, por su parte, resaltó que “fue una linda y dura carrera, la subida potente, y Luchito ahí guiándome bien”.

“Nos fuimos apoyando mutuamente, cuando uno va flaqueando apoya el otro. Él me daba ánimo en las bajadas y yo a él en las subidas. Fue un buen equipo, extraordinario”, concluyó.
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