El fabricante alemán de artículos deportivos Puma anunció, este miércoles, que optó por interrumpir los contratos de patrocinio con atletas y asociaciones de deportes rusas debido a la invasión en Ucrania.
Una decisión netamente política que comunicó el consejero delejado de la famosa marca, Björn Gulden, quien además, presentó los resultados del primer trimestre.
A su vez, el empresario nacido en Suiza notificó que las 110 tiendas físicas que tiene Puma en Rusia siguen cerradas. Un veto que se suma al de otras importantes empresas a nivel mundial.
Cabe consignar que la popular industria deportiva contempla a más de 1.300 trabajadores en suelo ruso, a quienes debe y va a seguir pagando, pese a no producir en dicho país, al igual que en Ucrania pero por distintas razones.