El kayakista nacional David Toro hizo historia al realizar con éxito el descenso de la Cascada del Puma del río Fuy, que tiene 35 metros de altura, es clase 5+ (una de las con mayor grado de dificultad) y que se ubica en el parque Huilo Huilo en la región de Los Ríos.

Cuenta que es el primer chileno en lograr esta hazaña y también el primer representante nacional en lograr con éxito un descenso de esta altura, que está entre las mayores dificultades a las que se puede acceder.

“La caída en una cascada como ésta no son más de 2 segundos y a cualquiera le parecería que es solo tener el valor y tirarse, pero al saltar una cascada lo que busco es detener el tiempo y tener completo control de mi kayak. Cada movimiento que sea lo más suave, sentir el aire, visualizar cómo caeré para finalmente aterrizar. Son solo 2 segundos que valen completamente la pena” explica Toro en conversación con BioBioChile, sobre el logro conseguido el jueves 21 de enero.

El kayakista oriundo de Futaleufú contextualiza este logro a través de su historia. “Siempre fui muy deportista. Los últimos 6 años he estado muy enfocado en el kayak gracias a una familia de acá de Futaleufú que me regaló mi primer kayak, con el que aprendí mirando videos en youtube. Empecé a conocer gente, me ayudaron, seguí avanzando y no paré más”, recuerda.

1 año en 2 segundos

El también estudiante de Topografía, de solo 21 años, comenta que en sus tiempos libres es carpintero, además de ser guía de rafting. Como si fuera poco, en el último año también le dedicó tiempo a entrenar pensando en este histórico logro.

Fernanda Viera | @agradeceryser

“Desde que comencé a practicar kayak, siempre entrené pensando en metas grandes, pensando en que algún día voy a hacer desafíos muy grandes, pero específicamente pensando en Puma fue alrededor de un año de preparación”, calcula David Toro, que muestra sus logros en Instagram, en la cuenta @davitokayak.

“Esta preparación es física y mentalmente. Viajé a lo largo de todo Chile buscando las mejores cascadas, los mejores ríos y a la vez entrenando mucho físicamente, mucho abdominal, mucho salir a correr y preparar la mente para un desafío como este”, especifica.

No es para menos, ya que la cascada del Puma tiene una altura de 35 metros y es considerado una de las más difíciles. El mismo deportista lo explica: “Los ríos se catalogan en una dificultad del 1 al 6, donde clase 1 sería algo muy fácil y 6 sería algo imposible de remar, con peligro extremo y no es navegable”.

Entonces, ¿Cuál es la dificultad de esta cascada? “La dificultad de esta cascada es 5+, es como el tope. En chile ningún chileno había realizado una cascada tan alta. Fui el primero y esta cascada tiene dificultad no solo por su altura. Previo a la cascada las corrientes que tiene son muy complicadas, de todas partes entran corrientes que te pueden cambiar la dirección de tu kayak. Tiene una línea única, solo por el centro”, complementa el deportista.

Lo que viene

El futaleufuense, que destaca también en ciclismo, entre otros deportes, sabe que en su carrera hay muchas personas que han sido importantes y lo reconoce con orgullo.

“Está toda mi familia atrás y para este proyecto en especifico conté con un equipo que era un encargado de seguridad, uno de cinematografía y dos encargados de las fotografías. Fue un equipo como de 8-9 personas. Me costeé todo el viaje con ayuda de mi familia, fue un desafío personal”, agradece.

Sobre sus proyectos futuros, quiere seguir haciendo historia, aunque reconoce que por ahora está enfocado en disfrutar.

“Estamos tratando de saborear lo que fue saltar de buena manera y lograr este resultado, el próximo desafío podría ser en México…”, adelanta, aunque aclara que por ahora es solo un deseo. “No hay nada definido aún”, recalca. Claro, todavía continúa la satisfacción de haber sido el primer chileno en saltar una cascada de las dimensiones de la del Puma.

“Creo que ningún premio o trofeo me entregarían lo que me da estar abajo de ese monstruo, mirarlo y decir ‘te superé’. Afortunadamente todo salió tal como lo había planeado”, finaliza.