Consternados. Así se encuentran los amantes de las artes marciales mixtas tras conocer la noticia de la detención del peleador de la UFC, Irwin Rivera, quien fue acusado de intentar asesinar a puñaladas a sus dos hermanas.

El mexicano, quien permanece bajo custodia policial en el Centro de Detención de West Palm Beach de Florida, fue detenido el jueves por dos cargos de asesinato premeditado en primer grado.

Así lo dio a conocer el medio especializado Diario MMA, quienes señalaron que la situación habría ocurrido cuando las mujeres (de 22 y 23 años) fueron de visita a la casa de su hermano.

Allí habrían sufrido el ataque con arma blanca mientras dormían en la pieza de huéspedes. Según el medio, una de ellas logró escapar y pidió ayuda a los vecinos.

Señalar que ambas presentaban heridas en la espalda, la cabeza, el rostro, los brazos y las manos.

Rivera logró escapar pero fue detenido posteriormente por la policía. Al ser arrestado, reveló que el ataque “era su propósito” porque “un poder más alto se lo indicó”.

A raíz de esta situación, la UFC emitió un comunicado lamentando lo sucedido y aclarando que su próximo combate fue suspendido.

“UFC está al tanto del incidente reciente que involucró a Irwin Rivera y posteriormente recibió información de su gerencia de que ha estado exhibiendo un comportamiento consistente con problemas de salud mental”, expresaron.

“Las acusaciones son extremadamente preocupantes y la organización actualmente está recopilando información adicional. La investigación está en curso y cualquier posible próximo paso, incluida una acción disciplinaria o atención médica, se determinará al concluir. Además, UFC ha informado a la gerencia de Rivera que no se le ofrecerá una pelea en este momento”, sentenciaron.