Su primer oro Panamericano. La patinadora María José Moya se quedó con la presea dorada en Lima 2019 tras una notable carrera en 300 metros a contrareloj femenino.

La nacional consiguió una marca de 26.441 segundos, 0.186 más rápida que la colombiana Geiny Pájaro, quien terminó en segundo lugar. El bronce fue para Dalia Soberanis, de Guatemala.

Tras su actuación Moya comentó que “estaba muy nerviosa, lo asumo, pero creo que esos nervios los logramos canalizar con mi equipo de trabajo”.

“Esta era una deuda pendiente conmigo misma y mi equipo de trabajo, siempre pasaba algo antes de correr en los Panamericanos. Así que muy feliz de esta medalla”, agregó la patinadora.

Consultada por su hija, de un año y medio, y que la obligó a estar fuera de competencias por dos años, Moya indicó que “es un trabajo muy largo, un trabajo que tuve que hacer en pocos meses. Esta medalla obviamente que va dedicada a mi hija que no pudo acompañarme a Lima porque aún es muy pequeñita”.

“Era volver a encantarme con los patines, volver a decir ‘sí, puedo’. No puedo decir que no costó, porque estaba lejos de mi casa, mi familia, mi hija, pero al final se logró y estoy muy feliz”, añadió muy emocionada la nacional.

Finalmente, María José señaló que espera poder decir presente en la siguiente cita Panamericana, la de Santiago 2023.

“Espero, si Dios quiere, estar vigente para Santiago 2023 y ahí ver qué pasa porque ya tendre 34 años, no será menor, y ahí veré qué puedo hacer. Pero el próximo año, sí o sí, lucharé por clasificar al Mundial”, sentenció Moya.