La selección chilena masculina de Rugby Seven terminó en un positivo decimoséptimo lugar en el Mundial que se disputó de San Francisco, luego de superar a Hong Kong y quedarse con el Bowl del torneo. Un resultado que fue destacado por el capitán del equipo, Felipe Brangier, quien valoró el significado que puede tener para el futuro de la disciplina en el país.

En declaraciones a World Rugby, Brangier se refirió primero al triunfo 20-7 ante Hong Kong, asegurando que fue gracias a la “disciplina, paciencia, al saber esperarlos, porque sabíamos que era un equipo con muchas destrezas y que traslada muy bien la pelota. En algún momento se iban a desesperar y ellos mismos fueron los que se desprendieron de la pelota con patadas y un poco de juego desesperado. Esas fueron señales para nosotros de que estábamos trabajando bien, un golpe anímico para el equipo de seguir trabajando de pie y creo que nos dio resultado”.

Para el capitán del equipo “el título del Bowl tiene un significado muy importante para Chile, para el grupo y todo lo que hemos estado haciendo silenciosamente”, marcando de paso las diferencias con lo ocurrido en el Mundial de Argentina en 2001, donde también alcanzaron la misma posición.

“Es el resultado que queríamos. Hace 17 años se obtuvo este mismo título, por con la diferencia que ahora, en 2018, el rugby seven es una disciplina olímpica, el crecimiento que ha tenido en el mundo es extraordinario. Se puede ver el desarrollo que ha tenido, el nivel de juego, las destrezas y la preparación que se requiere para este deporte está en el más alto nivel y la más alta exigencia” sostuvo.

El especialista agregó que “a nosotros, que somos una estructura completamente amateur, nos cuesta alcanzar a la competencia. Así que es el mismo resultado de hace 17 años, pero todos sabemos cómo ha crecido la disciplina, entonces subliminalmente creo ésto es mucho más valioso e importante, por lo que estoy contento por lo logrado”.

Para Brangier, lo que viene para este deporte “es muy auspicioso. Tenemos grandes expectativas de lo que va a ser el seven para adelante. Este triunfo es una señal muy potente para los chicos, para el desarrollo del seven en Chile“, enviando de paso un “un mensaje potente para todos aquellos que se han desvinculado un poco en el camino, para los que no han creído en el rugby. Es balde de agua fría para ellos. Pero les dedicamos de todas formas el triunfo a todo Chile, que siempre nos da una palabra de apoyo y aliento, pese a que nos toca a veces trabajar un poco en las sombras de otros deportes. Estamos muy agradecidos de todos los que nos han apoyado”.