Ya está en Chile y fue recibido por todos los que lo esperaban hace semanas. El momento en que ‘Guga’ Ortiz bajó del avión-ambulancia en el hangar de Aerocardal se convirtió en un verdadero hito para el deportista que el 12 de agosto sufrió caída de espaldas que terminó con una lesión en la vértebra T6 luego de un entrenamiento. Pero luego de largas 17 horas de vuelo y días de espera en Canadá, el rider llegó a Chile para comenzar su recuperación.

Su padre fue el primer en abrazarlo luego de bajar del avión. ‘Guga’ ya estaba en su país y ahora comenzaba a escribir uno de los capítulos más importantes de su vida.

El optimismo fue una de las facetas que más destacó desde el accidente y es que no cualquiera tiene el ánimo que contagia el campeón nacional de enduro. En conversaciones con La Tercera, Ortiz señaló que se sintió un poco nervioso por el recibimiento “porque las cámaras siempre me han puesto nervioso, jajaja”, pero “estoy feliz de estar con mi familia y mis amigos al fin”.

En esa línea, ‘Guga’ declara que unas semanas luego de su accidente se conectó con el mundo para ver qué ocurría. “Las últimas dos semanas estuve conectado. Y ahí, claro, vi todos los mensajes de apoyo, las carreras que realizaron y todo lo que se organizó para ayudarme”, a eso agregó que “todo eso me llenó de ganas y me motivó a hacer la rehabilitación de la mejor forma posible para volver lo más pronto a Chile”.

Ahora el sampedrino deberá comenzar su rehabilitación, pero para eso deberá pasar por los pasos previos para iniciar su nueva vida. “En mi vuelta a Chile pensaba en comenzar rápido con la rehabilitación. Cuando partí con esos trabajos, tuve un par de percances con la duramadre y eso me causaba fuertes dolores de cabeza, pero muy fuertes, tanto que no me dejaban hacer nada. Ahí tuve que parar y comenzar de nuevo, con ejercicios más suaves y sin hacer tanta fuerza. Todo fue de menos a más, otra vez”. Acto seguido, ‘Guga’ señaló que “pensé que iba a llegar a hacer rehabilitación de inmediato, pero no. Voy a tener que comenzar como en todos los hospitales del mundo: primero, me tienen que conocer, saber bien mi estado, mi diagnóstico y de ahí empezar a trabajar en lo que venga”.

Por último, Ortiz habló con el medio sobre su actitud y mentalidad luego del accidente por lo que el rider señaló que “en los primeros días lo único que veía es que si me ponía negativo sólo conseguiría retroceder y yo no quería eso, porque ya estoy muchos pasos atrás. Lo único que me queda es estar bien anímicamente, ser positivo y tirar para adelante; retroceder lo menos posible. Obviamente que a veces hay que retroceder y lo haré, seguro, pero solamente algunas veces.