Cuatro medallas. Esa fue la cosecha que registró hace dos fin de semana Bárbara Hernández en la Copa del Mundo de Aguas Gélidas en Letonia. La ‘Sirena de hielo’ volvió a poner el nombre de Chile en lo más alto, donde resaltó su actuación en los 450 metros de aguas abiertas al subirse al escalafón más alto del podio.

La competencia llevada a cabo el viernes 4 de noviembre en la localidad de Jelgava no era nada de sencilla. Con unas aguas a 3 grados Celsius, la deportista de 30 años se quedó con el primer lugar del Grupo C (30 a 39 años) al registrar un tiempo de seis minutos, 50 segundos y tres centésimas.

“Después de nadar los 450 estaba muy contenta, pero la verdad soy bien especial en este tipo de competencias, ya que estoy concentrada en la prueba y al salir del agua en vez de celebrar priorizamos la recuperación, que es muy dolorosa”, señaló.

Claro, en la mente de la oriunda de Recoleta no había otra cosa que concluir la exigente prueba. “El agua es tan fría que me pegué con una de las boyas. Era tanto el dolor que pensé me había pasado a llevar un tendón, pero fue la sensación de frío”, relató.

Terminados los protocolos de recuperación, la psicóloga de profesión se puso a pensar rápidamente en los desafíos del día siguiente. Remató tercera en los 50 metros libre y 25 metros mariposa. Además, se colgó el oro en los relevos junto al equipo de Estonia.

Bárbara Hernández nadando en una de las competencias en Letonia
Bárbara Hernández nadando en una de las competencias en Letonia

La angustiosa búsqueda de financiamiento

El exitoso paso de Hernández en Letonia estuvo muy cerca de no concretarse debido a los problemas que tuvo para encontrar financiamiento. El Instituto Nacional del Deporte (IND) le entregó 5 millones de pesos que sirvieron para las inscripciones y viajes de las tres primeras fechas del certamen (Letonia, Rusia e Inglaterra), pero faltaba para la estadía y alimentación.

La angustia se apoderó de la ‘Sirena de hielo’ semanas antes del 26 de octubre, día que emprendía su aventura a Europa.

“Fue toda una odisea. Yo pensé que después de los resultados del Mundial en marzo iba a ser distinto“, dijo la recoletana, que recordó las dos preseas doradas y una de bronce que se adjudicó en el Mundial de Nado Invierno de Tyumen, torneo a que asistió gracias al aporte de los trabajadores de La Vega y de Leonardo Farkas.

“Resultó muy difícil conseguir ayuda de empresas que me habían ofrecido apoyo. A menos de una semana del viaje todavía no tenía nada en la cuenta”, agregó.

Finalmente, se embarcó hacia el ‘Viejo continente’ con la ayuda de la Municipalidad de Recoleta y del empresario Andrónico Luksic.

“El apoyo de Andrónico Luksic fue fundamental. Gracias a eso pude viajar. Ahora estoy más tranquila estando acá, porque una semana antes tenía mucha angustia. Sinceramente hay un interés real y profundo de ellos por cómo iba a enfrentar esta competencia”, expresó.

Asimismo, ante la imposibilidad de que su entrenador Gabriel Torres viajara a Letonia, el dinero comprendió el traslado de su pareja Jorge Villalobos, ingeniero naval, kayakista y juez de natación.

“Para mi es una prioridad viajar con alguien que me acompañe en la recuperación. La organización te pide a alguien que te asista. Eso significó un costo extra. No podía estar acá un mes y medio sola sin alguien que me ayudara en el momento de la competencia. Muy agradecida de ese aporte”, comentó.

Con la mente en Rusia, Inglaterra… y en conseguir dinero para China

La Copa del Mundo de Aguas Gélidas es un circuito anual de seis fechas organizada por la Asociación Internacional de Nado Invierno (IWSA en su sigla en inglés), las cuales otorga un puntaje para una clasificación general.

Bárbara Hernández en Moscú | Foto: Bárbara Hernández
Bárbara Hernández en Moscú | Foto: Bárbara Hernández

Bárbara Hernández tiene asegurada la participación en las tres primeras. De hecho se encuentra en Moscú entrenando en una piscina temperada cerca del hotel en que se hospeda y con una temperatura ambiente de 1 grado Celsius, para trasladarse próximamente a Vladivostok, ciudad en que se desarrollará la segunda jornada de la competición entre el 17 a 20 de noviembre.

“Como las pruebas son muy duras, no puedo estar pensando en una medalla, sino en terminarla”, reiteró. “Espero hacer lo mejor posible, no distraerme y dejar a Chile en el mejor lugar posible”.

Su estancia en Europa culminará en el lago Windermere en Inglaterra, ya que competirá entre el 8 a 10 de diciembre. El regreso a Chile está programado para el 15 de diciembre. Estando acá la tarea será una sola: conseguir dinero para ir a la fecha de China, pactada para enero próximo y a la cual está clasificada por invitación, debido, precisamente, a su buen rendimiento en Letonia.

“Lo ideal sería seguir concretando apoyo con el IND o que las empresas estén dispuestas a apoyar este proyecto de natación”, culminó.