La pesista nacional María Fernanda Valdés recibió una buena noticia luego de confirmarse el dopaje de ocho deportistas que participaron en Londres 2012, entre ellos seis de la modalidad de halterofilia.

La kazaja Svetlana Podobedova, la rusa Natalia Zabolotnaya y la bielorusa Iryna Kulesha, oro, plata y bronce respectivamente en la categoría 75 kilos, fueron sancionadas por el Comité Olímpico Internacional (COI), por lo que Valdés subirá del noveno al sexto lugar y obtendría así un diploma olímpico.

“Me alegra que se dé a la luz el secreto a voces, que era competir casi con hombres“, comentó la chilena a La Tercera.

La española Lidia Valentín pasaría a ocupar el primer lugar, aunque el COI todavía no entrega los nombres de las medallas que quedaron vacantes.

Otras dos campeonas olímpicas de la halterofilia fueron despojadas de sus medallas: las kazajas Zulfiya Chinshanlo (-53 kg) y Maiya Maneza (-63 kg).

El atletismo fue sancionado con dos rusos en el lanzamiento del martillo y el salto con pértiga. Un noveno implicado, el luchador ruso Besik Kudukhov, murió en noviembre de 2013.

Sería el segundo diploma olímpico de Valdés en una cita de los anillos tras el séptimo puesto en Río 2016.