El Comité Paralímpico Internacional (CPI) anunció que no autorizará a ningún atleta ruso a participar en los Juegos de Río (7-18 de septiembre), desatendiendo el pedido de 175 deportistas que solicitaron competir bajo bandera neutral, tras la suspensión de su país por el escándalo de dopaje de Estado.

“La posición del CPI es clara, y ha sido apoyada por la reciente decisión del Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS) que, entre otras cosas, rechazó el pedido del Comité Paralímpico Ruso para exigir al CPI que aceptara la entrada de atletas individuales rusos que podían mostrar que estaban ‘limpios"”, afirmó el organismo en un comunicado.

A principios de agosto, el CPI decidió excluir al comité ruso a raíz del escándalo de dopaje de Estado revelado por el informe de la comisión McLaren, una decisión que fue apelada inmediatamente por Moscú.

La semana pasada, sin embargo, el TAS rechazó su recurso, en una medida tachada de “fuera de toda justicia, moral y humanidad” por el presidente del país, Vladimir Putin.

A esa decisión se refirió el Comité Internacional para justificar su impedimento a que los “más de 175 atletas rusos” que solicitaron competir bajo bandera neutral -según el propio CPI- participen en el mayor evento del deporte paralímpico mundial, que comenzará en Río el próximo miércoles.

El organismo afirmó en el comunicado que es “necesaria, proporcionada y legítima” su suspensión a la potencia del este de Europa, hasta que pueda demostrar “que es capaz de hacer cumplir el código antidopaje del CPI efectivamente en Rusia, sin interferencia del gobierno”.

Batalla judicial

El país fue acusado por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) de haber puesto en práctica un inmenso sistema de fraude en los resultados. Para los Juegos Olímpicos de Río, el COI estableció que fuera cada federación internacional la que decidiera qué deportistas podían competir en el evento.

Pero el CPI fue más allá. El 7 de agosto, con los olímpicos comenzando en Brasil, anunció que excluía a Rusia de los Juegos Paralímpicos que se inaugurarán en el Maracaná justo un mes más tarde.

La decisión llegaba después de estudiar el informe McLaren, que se hizo público el 18 de julio y desveló un sistema de organizado de dopaje, utilizado en el país durante los Juegos de Invierno de Sochi 2014.

Entre las muestras que fueron cambiadas entonces para convertirlas en negativas había 35 pertenecientes a deportistas paralímpicos, que según el CPI se ampliaron después con diez más.

“Creo que el gobierno ruso abandonó catastróficamente a sus deportistas paralímpicos. Sus medallas desprovistas de cualquier moral me asquean”, afirmó el presidente del CPI, Philip Craven, al anunciar la decisión.

A partir de entonces, comenzó una batalla judicial con Moscú, donde las autoridades de la potencia europea recurrieron hasta a la Justicia Federal suiza, que este mismo miércoles les negó las medidas provisionales solicitadas para permitir la participación de sus deportistas.

Y con la prohibición del Comité Internacional para que los atletas “limpios” participen bajo bandera neutral se le cierran definitivamente las puertas de Rio.

“El CPI siente gran solidaridad hacia todos los atletas rusos que ahora se quedan si competir en los Juegos Paralímpicos de Río 2016″, afirmó Xavier Gonzalez, director ejecutivo del organismo, en el comunicado.

“Trágicamente, sin embargo, las autoridades rusas les negaron a sus atletas la oportunidad con sus acciones”, añadió, instando a su comité a que realice las reformas necesarias para volver a ser aceptado a nivel internacional.

Por este motivo, Rusia no contó con 113 deportistas, incluyendo la casi totalidad de su selección de atletismo (67 atletas de 68), en los Juegos Olímpicos que terminaron el pasado 21 de agosto en Río. A pesar de estas bajas terminó cuarta en el medallero, con 19 oros.