Luego que el entrenador Alfredo Arias dejara en las manos de la dirigencia de Azul Azul el futuro de Ángelo Henríquez, el delantero de Universidad de Chile sacó la voz para pedir respeto por su trayectoria y descartó de plano ser “el último atacante” de la plantilla.

En diálogo con El Mercurio, el ex jugador del Dinamo Zagreb declaró que “fue un mal semestre, pero nada está perdido. Espero que ahora vayamos mejorando. Mi deseo siempre fue quedarme y ayudar a la U a hacer historia y nada ha cambiado, daré lo mejor de mí mientras esté aquí. No soy el último delantero, voy a seguir dando lo mejor de mí y espero algún día probarle a Arias que tengo lo que se necesita y crea en mí lo suficiente para hacerme jugar”.

La regencia de la concesionaria del elenco colegial busca hacer caja con un préstamo por Henríquez, más aún luego que ya reforzaran el ataque con el arribo del argentino Marcos Riquelme.

No obstante, el jugador de 25 años quiere tener una revancha en la tienda azul en la segunda parte del año. “La ‘U’ sabe que quiero quedarme. Se habla mucho de dinero, pero yo llegué acá acortando mi sueldo y con la intención de ayudar al equipo en un momento complicado”.

Además, Henríquez se dio el tiempo para criticar las filtraciones de su contrato a la prensa, especialmente unos pasajes para su pareja.

“Yo no pedí un auto o cosas extravagantes, sólo dos pasajes al año para que mi novia pueda visitarme y pudieron decir que no. Me siento dolido porque se comenta sobre mi familia. No encuentro profesional cualquier tipo de filtraciones, espero más respeto de la gente del club, como yo siempre me he comportado”, sentenció.