Este lunes se confirmó lo que parecía una certeza ya el sábado pasado luego de la derrota de la Universidad Católica contra Palestino por 3-0. Gustavo Poyet dejó la banca cruzada tras haber conseguido 29 puntos en 18 partidos (19 fechas) y dejando al equipo en el quinto lugar del torneo.

Tal como decía el uruguayo en la conferencia de prensa en su despedida, logró el título de la Supercopa, clasificó a octavos de final en Libertadores, pero en el Campeonato Nacional no pudo mantener una regularidad de resultados que le permitiera al equipo seguir dominando el fútbol nacional.

Pero más allá de los resultados y puntos conseguidos, ¿Qué cambió entre la UC de Holan que encantaba a muchos hinchas con la de Poyet, que terminó interrumpiendo su contrato para dar un paso al costado?

Con datos de StatsBomb analizamos algunos aspectos de ambos equipos para así comparar los rendimientos más allá de los resultados evidentes.

Ofensivamente

En ataque fue donde más sufrieron los hinchas de la Universidad Católica este año y los datos avalan esa sensación. El equipo pasó de ser el gran dominador con respecto a la calidad de las chances creadas en 2020 a uno que bajó visiblemente su calidad en la producción de ocasiones en el 2021.

BioBioChile con datos de StatsBomb

En el gráfico relativo a los goles esperados (xG) – que es la probabilidad de que un disparo sea gol según distintos factores como procedencia del pase, resistencia rival, situación de juego, etc – se evidencia que el equipo de Holan supera en la estadística total sin contar los penales (PK), así como también en juego dinámico y en el xG por cada disparo.

Nota: Se considera ‘juego dinámico’ las jugadas procedentes ya sea de contrataques, juego directo o juego combinativo/elaborado. Exceptúa las acciones a balón parado.

Esto quiere decir que más allá de la cantidad de remates que generaron ambos equipos, el de Holan generaba chances con mayor probabilidad de que sea gol en el largo plazo. Esto se explica, entre otras cosas, por las formas de llegar a las situaciones de remate, ya que en la posesión promedio por partido registran números similares.

En el primer gráfico se puede ver que el equipo de Holan completaba más regates respecto al de Poyet; por partido remataban una cantidad similar, pero la calidad de esas chances eran mejores las del equipo del 2020. Otro aspecto que describe la forma de atacar del equipo de Poyet son los Box Cross% de StatsBomb, que es el porcentaje de pases completados que entran al área y que fueron centros.

A diferencia del equipo de 2021, el conjunto dirigido por Ariel Holan no apostaba tanto por centros.

En ‘velocidad ofensiva’ el equipo de Holan también supera al de Poyet: el 2020 la UC promediaba 2.83 metros/segundo en los ataques que terminaban en disparo, mientras que el equipo de Poyet registró 3.13 metros/segundo en el mismo ítem.

Defensivamente

En defensa el equipo de Poyet se ve levemente mejor que el de Holan, aunque no sirvió de mucho: en lo que va de 2021 la UC promedia 1,33 goles en contra por partido, mientras que el de Holan 1,02 en el mismo dato.

¿Cómo entonces mejoró levemente el equipo de Poyet defensivamente? Aunque se puede decir que es casi imperceptible por la poca diferencia, el equipo del 2021 concedía menos disparos y también menos xG.

Habla también de que el juego de Poyet era más conservador en comparación al entrenador anterior. Esto se evidencia por ejemplo en la distancia media de la última línea defensiva (la de los defensores propios) respecto al propio arco. El 2021 se ubicó unos metros más atrás que en el 2020.

BioBioChile con datos de StatsBomb

Una métrica para medir la presión de los equipos es el PPDA, que relaciona las acciones defensivas propias (del equipo que defiende) respecto a la cantidad de pases que da el rival en el 60% más lejano del campo de juego respeto al arco propio (del equipo que defiende). Una de las razones para determinar esa zona es que cuando se ingresa en el 40% más cercano al arco que se defiende ya no se considera presión, sino que es más cercano a un repliegue.

En este ítem el conjunto de Poyet (permitía en promedio 6.34 pases) también se ve levemente mejor que el de Holan, que permitía 7.31 pases por acción defensiva en esa zona.

A continuación el PPDA respecto al resto de los equipos del campeonato chileno.

Cedida de StatsBomb a BioBioChile
Cedida de StatsBomb a BioBioChile

Sin embargo, respecto al resto de los equipos el conjunto de Holan era más activo defensivamente cerca del arco rival. En tanto, el de Poyet distribuía más su actividad en defensa en el campo de juego respecto al resto de los clubes. A continuación los mapas que muestran esto.

Cedida de StatsBomb a BioBioChile
Cedida de StatsBomb a BioBioChile

Conclusiones

Si bien el fútbol no se puede separar en ataque y defensa (por las razones de influencia que una fase puede tener en la otra y viceversa), una de las conclusiones que se pueden sacar en base a estos datos es que el equipo de Poyet no se vio muy lejos del año pasado cuando no tenían el balón.

El gran problema fue al construir juego para generar chances de real peligro en el arco rival. Durante el torneo careció de ideas para aumentar sus posibilidades de marcar en el arco rival.

En el torneo de 2020 la UC promedió 1,85 goles por partido, mientras que este 2021 promedia 1,55 por cada encuentro.

Por ahora será tarea de Cristián Paulucci y compañía tratar de recuperar el poder ofensivo que caracterizó a la UC en el campeonato conseguido con Holan.