Antes de que llegaran los campeonatos de Copa América y Chile disfrutara de la exitosa generación dorada, pocos fueron los momentos que quedaron grabados en la memoria colectiva del hincha, sin embargo, lo que hizo Marcelo Salas hace 21 años sigue encandilando a todos los amantes del fútbol.

La selección chilena se encontraba realizando una gira de amistosos por Europa como preparación para el Mundial de Francia 98. Los dirigidos por Nelson Acosta tendrían un desafío mayor al enfrentarse a la poderosa selección de Inglaterra en el mítico Estadio Wembley.

Ante más de 65 mil espectadores, el ‘Matador’, que en ese entonces la rompía en River Plate, se robó todas las miradas y comenzaría a cimentar su exitoso paso por el fútbol Europeo.

La leyenda comenzó a escribirse a los 44 minutos del primer tiempo. Tras un despeje de la defensa chilena, Clarence Acuña condujo el balón hasta mitad de cancha y se la entregó a Jose Luis Sierra, quien envió un hermoso pase de más de 40 metros al Matador.

Salas controló el balón con el muslo izquierdo y sin que la pelota tocara el piso fusiĺó al arquero con un increíble disparo. Algarabía chilena en la casa del fútbol mundial, aunque faltaba la guinda de la torta.

Ya en el segundo tiempo, el ‘Matador’ tomó un balón en el área y dejó hecho un nudo a su marcador, Sol Campbell, quien no tuvo más remedio que derribar al chileno.

Frente a un Wembley que se vino abajo en abucheos, Salas demostró toda su sangre fría y con un disparo cruzado engañó al portero inglés.

El partido terminó 2-0 a favor de Chile, Salas se robó todas las miradas, fue figura en el Mundial y más tarde, traspasado en una millonaria operación al Lazio de Italia.