El fracaso de la selección chilena en su objetivo de llegar a la Copa del Mundo ‘Rusia 2018’ dejó muchas heridas abierta, tanto entre los hinchas como al interior del plantel de jugadores.

Un ejemplo de ello fue lo que ocurrió entre Claudio Bravo y Arturo Vidal, donde declaraciones de familiares del primero apuntaron contra el mediocampista por supuestas indisciplinas durante el proceso. Intercambios que marcaron una diferencia dentro del grupo y que el entrenador Reinaldo Rueda deberá intentar solucionar.

Como un primer paso, el DT de la ‘Roja’ reconoció que el desencuentro fue tema durante sus reuniones con los seleccionados en Europa. “Conversé el tema con cada uno de ellos. No es fácil de entender, son dos hombres que se quieren, respetar y admiran y que están dispuestos a seguir en la selección” sostuvo en conferencia de prensa.

“Todo lo que pasó saben que es secundario. Hablé el tema con ellos y también con todos los jugadores sobre el suceso que pasó por una tercera persona. Se tienen respeto y van a seguir siendo un gran aporte“, indicó.

Rueda aclaró que “sé que no han hablado personalmente, pero ahora van aprovechar la reunión en Estocolmo (para el amistoso con Suecia) para que lo hagan, conversen, se limpien los dos, limpien el grupo y se hagan ese lavado mental“, concluyendo que “esa es la dinámica que vamos a realizar, ambos están muy dispuestos. Claudio siempre ha visto en Arturo un ser humano especial y Arturo también, porque admira a Claudio“, reveló.