No se guardó nada. Juan Antonio Pizzi, entrenador de la selección chilena de fútbol, cuestionó la visita relámpago del presidente de la FIFA, Gianni Infantino, a Buenos Aires.

La máxima autoridad del balompié mundial llegó suelo trasandino la tarde del miércoles, para compartir con la AFA y confirmar la postulación de Argentina -junto a Uruguay y Paraguay- como sedes de la cita planetaria del 2030.

Esto último generó indignación en Perú, teniendo en cuenta que todo ocurría en la previa del trascendental juego de las Clasificatorias. Un hecho que Pizzi apoyó.

En la conferencia de prensa tras el triunfo con Ecuador, ‘Macanudo’ recalcó que “me parece que fue desafortunada, a destiempo. No era necesario”.

“Además de creer que somos todos nobles y transparentes hay que aparentarlo”, complementó el estratega, haciendo hincapié en que “una situación como ésa innecesariamente genera algo que no es conveniente”.

Al ser consultado si todo será transparente el próximo martes, en la fecha final, Pizzi sostuvo que “soy medio inocente y confío en que no podemos trabajar en un ámbito de sospecha o suspicacia por distintas situaciones”.

“Nuestra visión tiene que ser creer que no puede pasar esas cosas. Hay gente mala en todos lados. Uno no podría ejercer mi profesión creyendo que podrían suceder esas cosas”, concluyó.