Ñublense, cuadro de la Primera B del fútbol profesional chileno, se transformó en el primer club del país en acogerse a la nueva Ley de Protección al Empleo, suspendiendo los contratos de jugadores, cuerpo técnico y trabajadores.

El cuadro de Chillán señaló a sus funcionarios en un comunicado que la suspensión laboral “implica que el trabajador queda eximido de su obligación de prestar al empleador los servicios contratados, liberando con ello a este último del pago de las remuneraciones a contra de la fecha estipulada de suspensión (21 de marzo de 2020)”.

Hernán Rosenblum, gerente de los chillanejos, señaló a El Mercurio que “nos acogimos a la ley, porque las platas no dan para cubrir los sueldos de toda la institución”.

“Acá, además del plantel, hay 60 funcionarios y no queremos hacer diferencias. No recibimos ingresos de sponsors y ni recaudación, y lo que nos da el CDF no alcanza”, argumentó.

Cabe recordar que algunos equipos, como Unión Española y Deportes Iquique en Primera A, ya habían decidido rebajar temporalmente los sueldos de sus futbolistas.

Asimismo, en otras instituciones, como Colo Colo y Universidad Católica, no se han cerrado a la opción de aplicar un recorte en los salarios de sus planteles.