Agustín Farías, mediocampista argentino de Palestino, se refirió en profundidad a la crisis político-social que se vive en Chile, con manifestaciones que piden al gobierno mejoras importantes en temas sociales.

En diálogo con el diario trasandino Olé, el jugador del cuadro de colonia declaró que “cuando llegamos con mi familia a Chile a finales de 2014 veíamos que todo estaba bien acá. Que era un país estable, con muchas cosas lindas para vivir, pero la verdad es que no era tan así. Vivíamos en una irrealidad”.

“Pensábamos que estas cosas podían pasar en la Argentina por todas las cosas que se viven hace algunos años. Pero nunca acá. De repente se fue todo a la mierda… Comenzó por una protesta estudiantil, pero luego se sumó el resto de la sociedad para protestar por las pensiones, los salarios, los subtes (Metro)… En las calles hay militares y después de las siete de la tarde ya no se puede andar por ahí”, señaló.

“Sólo un día no tuvimos práctica y fue cuando estalló todo el conflicto. Después trabajamos como si fuera un día normal, aunque cuesta. Yo vivo en Vitacura, una comuna de Santiago que es bastante tranquila, pero nos entrenamos en La Cisterna, un barrio sencillo en el que han roto todo… Es un desastre. Obviamente que cuando vamos hasta allá, la familia queda preocupada. Porque si te cortan la ruta, olvídate: no tienes chances de volver, eh. Es una situación muy difícil”, contó el jugador de 31 años.

Por último, Farías ve inviable que se juegue la final de la Copa Libertadores en el Estadio Nacional de Santiago, definición fijada para el 23 de noviembre.

“Con todo esto me parece extraño que todavía se piense en jugarla acá (…) Desde que se desató este conflicto, todos los días hubo manifestaciones en diferentes puntos. Y vengo escuchando que ya estaban organizando marchas y protestas para el día de la final. Pero bueno, ojalá que todo esto se solucione para este fin de semana”, sentenció.