En todos los rincones del país, el fútbol de barrio se vive con gran pasión. Cada fin de semana, la gente se vuelca en masa a las canchas para apoyar al equipo de sus amores, demostrando que no es casualidad que sea considerado como el deporte más popular del mundo.
Según datos de la Asociación Nacional de Fútbol Amateur (ANFA), Chile tiene más de 3 mil equipos afiliados en alrededor de 328 asociaciones locales, lo que equivale a más de un millón y medio de personas las que se reúnen en torno a esta práctica.
Compromiso, pasión y sentido de pertenencia son algunos de los valores que se inculcan a través del fútbol, porque en el amateur no importa edad, raza ni religión, todos juegan por igual, transformándose en una de las herramientas más poderosas de inclusión que existe en nuestra sociedad.
Este aspecto toma más relieve en nuestro país, teniendo en cuenta que cada año la cifra de extranjeros que llega en busca de nuevas oportunidades y un mejor pasar va en considerable aumento.
El 10 de abril se cumplió un año de la aplicación de la nueva política migratoria del gobierno del Presidente Sebastián Piñera y las cifras reflejan la notoriedad de este fenómeno. Según los datos dados a conocer, en Chile hay un millón 251 mil 225 extranjeros, siendo Venezuela, Perú y Haití los países con mayor presencia.
Se trata de una realidad que ha costado asimilar, ya que el racismo es un problema latente a nivel mundial. Es aquí donde el fútbol cobra gran importancia, acogiendo y mostrando ese Chile que muchos desconocen, el de gente atenta y comprometida que siempre está dispuesta a dar una mano amiga.
Por lo mismo, ya son varios los equipos que entre sus filas sorprenden con un ‘refuerzo internacional’. Las mismas comunidades extranjeras se están organizando y formando sus propios clubes, aunque existe una gran traba para lograr la tan ansiada inclusión.
La inscripción que ‘le corta las piernas’ a muchos extranjeros
A pesar de su carácter recreativo , en el fútbol amateur no es cosa de llegar y jugar. Cada equipo debe rendir cuentas a la asociación donde está inscrito, estos a su vez lo hacen con la ANFA Regional, quienes finalmente son los que se reúnen a nivel nacional.
La ANFA es la organización deportiva más grande de todo el país y por lo mismo, el trabajo que deben realizar sus dirigentes es titánico y a pesar de los esfuerzos, quedan muchas cosas por mejorar.
La inscripción de jugadores es una de ellas. El club que quiera sumar a un nuevo jugador chileno a sus filas debe pagar una inscripción. Si no está en los registros de otro equipo la suma es cercana a los diez mil pesos, aunque esta puede varias si se trata de un traspaso a otro club (a 25 mil).
Por lo mismo resulta raro lo que ocurre con los extranjeros. El artículo 136° del reglamento de la ANFA, señala que “Los jugadores de doce años de edad o más procedentes del extranjero, al solicitar registro, deberán cumplir con todos los requisitos que se exigen a los nacionales y depositar previamente la cantidad de US$ 100 (Cien Dólares) o su equivalente en moneda nacional al tipo de cambio Dólar Observado publicado en el Diario Oficial de la fecha de la solicitud del registro, en beneficio de la Federación de su País”. Es decir 66 mil pesos, al menos 6 veces más que lo que cuesta inscribir a un nacido en Chile.
Se trata de un cobro que escapa de las posibilidades de muchos extranjeros, que justamente llegan obligados por el trabajo y el deseo de un mejor vivir. Aunque muchos clubes pagan esta suma, la realidad demuestra que el dinero nunca sobra y entre pagar las deudas o vestirse de corto, no hay tantas dudas al respecto.
Concepción es una de las ciudades con más equipos inscritos en la ANFA y por lo mismo no han estado ajenos a este inusual cobro a jugadores extranjeros.
En conversación con BioBioChile, el presidente del organismo regional, Juan Jiménez, indicó cuales son los motivos de este, diciendo que “Es una exigencia de FIFA y ese dinero se va a la Federación donde pertenecía el jugador. Como Anfa regional nosotros no podemos cambiar ese cobro, es un tema a nivel nacional, no está dentro de nuestras atribuciones”.
Jiménez reconoce que hace ya dos años el número de extranjeros inscritos ha ido en considerable aumento y que dentro del Consejo de Presidentes ya se ha tocado este tema, porque todos abogan por la inclusión.
Por lo mismo, indicó que “Tomamos la decisión de no cobrar la inscripción a los niños, considerando que hay muchos jóvenes que no tienen los medios ni la oportunidad, por lo tanto, ellos se inscriben de forma gratuita. Estamos partiendo de a poco”.
BioBioChile se contactó con el presidente de ANFA Nacional, Justo Álvarez, quien se comprometió a dar una respuesta al tema, pero hasta el momento de la publicación de este reportaje, no llegó.
El equipo de haitianos que sueña en grande
Todo comenzó como una instancia para preservar las raíces y la cultura de su país, pero rápidamente los integrantes de la Asociación Socio-Cultural y Deportiva de haitianos de Concepción clamaron por jugar fútbol.
Ernes Noel preside este grupo. Hace casi dos años que vive en Chile y desde que llegó una de sus principales motivaciones fue reunir a sus compatriotas, porque según dice “la verdad es que fuera de su país uno nunca va a estar del todo bien”.
Este entusiasta haitiano relata que llevan más de un año buscando la integración en la sociedad chilena a través del deporte. Han jugado varios amistosos, pero lamentablemente, los cien dólares significan un esfuerzo que escapa de la realidad que viven.
Noel destaca que “el futbol es la gran pasión de los haitianos, a todos les gusta asistir a los partidos y los que no están jugando hacen barra y dan su apoyo”. Recursos no tienen, pero hay personalidad jurídica, talento, determinación y esfuerzo.
Edson Ulises es el presidente del Club Deportivo Haitianos del Bío Bío , lleva casi dos años en Concepción, ciudad que el mismo define como ‘ la más hermosa de Chile’.
Fanático del fútbol desde pequeño , siempre tuvo en mente organizar a sus compatriotas para que pudieran hacer deporte. Hoy en día tienen un gran grupo , pero les falta una competición para demostrar toda su destreza con el balón.
El equipo está conformado por más de 25 jugadores que provienen de distintos puntos de la ciudad. Sobre su club, Ulises destaca que “Los haitianos vivimos con cariño y con amor, somos todos hermanos, nos ayudamos mucho, por ejemplo, si uno tiene hambre, lo invitamos a sentarnos a nuestra mesa, somos todos una familia”.
La idea del club es poder insertarse en una liga e ir subiendo de categoría. Ellos saben que la vida es difícil, pero este reto no los amilana y por lo mismo, Ulises declara que ” Mi sueño es llegar a jugar un partido contra Colo Colo o Universidad de Chile, pero también que entre nuestras culturas podamos entendernos mejor”.
Mientras esperan novedades para poder participar de alguna competencia, este grupo de jugadores ve con entusiasmo una fecha que sin duda será histórica para ellos. La selección chilena anunció que el último amistoso previo a la Copa América será contra Haití en el Estadio Sausalito, donde adelantan que habrá una verdadera fiesta en las tribunas.
La dirigenta que se la juega por la inclusión
Marisol Ceballos es la presidenta del Club Deportivo Los Castaños de Barrio Norte, en Concepción. Lleva casi dos años en el cargo, pero mas de ocho involucrada en todo lo que tiene que ver con su amado club.
Esta destacada dirigenta deportiva es el fiel reflejo de que con trabajo duro, compromiso y pasión se pueden lograr grandes cosas. La semana pasada celebraron la ‘Noche Naranja’, donde presentaron a todas las series del club y como plato de fondo estuvo el partido disputado contra Los Haitianos del Bío Bío.
Marisol ha estado desde el comienzo apoyando la inserción de este grupo de extranjeros, quienes reconocen su labor con una relación cercana, donde abundan las risas y la confianza. En medio de la entrevista , varios de los jugadores se acercaron para saludarla cariñosamente, reflejando el gran vínculo que los une.
Ella misma relata que “desde el primer día en adelante yo siempre me preocupe de no dejarlos solos , ellos tienen las mismas ganas y derechos que nosotros ¿Por qué le vamos a tener que negar nuestras mismas posibilidades?”.
A través de su gestión, ahora este club de haitianos tiene una cancha donde poder entrenar de forma gratuita una vez a la semana y su propia indumentaria.
El fútbol le ha demostrado que la inclusión además de ser posible, es necesaria y destaca sobre el grupo de haitianos con el que comparte que “Están súper motivados y convencidos de sus ideas, saben lo que quieren, tienen una alegría que contagian, no hay envidia en ellos, son unas excelentes personas”.
A través del trabajo realizado en su club, Marisol se encarga de promover la inclusión, la vida sana y la formación integral de niños e indica que “Lo bonito del amateur es que convoca a las personas, es alegría, entusiasmo y pasión. Somos todos una gran familia”.
Historias como esta hay en todo Chile. A paso firme, el país avanza hacia la inclusión, demostrando que el dicho “Y verás cómo quieren en Chile al amigo cuando es forastero”, es más que una simple canción.
