¿Cuál es el equipo con el peor rendimiento del fútbol chileno? La respuesta es tan particular como el origen y la historia de esta institución.

Hablamos de Jireh FC (en hebreo ‘Dios prooverá’), un club que milita en el grupo 2 de la Tercera B de nuestro balompié nacional.

Esta institución (el único club de fútbol cristiano evangélico en Chile) acumula tres puntos en 22 partidos, ningún triunfo, 22 goles a favor y 82 en contra, resultados que lo tienen peleando la liguilla de descenso.

“Empezamos el proceso bastante tarde porque el profe estuvo con la incertidumbre hasta el último momento de si íbamos a participar este año. Se nos fueron varios jugadores y no hicimos pretemporada”, confesó el capitán del equipo Nicolás Valenzuela a El Mercurio.

Pese a los malos resultados, hubo un momento que ilusionó al equipo, cuando por poco derrotan al Rodelindo Román de Arturo Vidal.

“Ese día se notó una motivación distinta en los jugadores porque Vidal estaba en Chile y se suponía que iba a ir. Nunca supimos por qué no llegó, algunos dijeron que estaba en una fiesta. Estuvimos a punto de ganar: íbamos 3-1 arriba y nos empataron al final. Hay partidos en los que hemos jugado bien, pero no se nos han dado los resultados”, agregó el goleador del equipo (13 tantos) Mauricio Lara.

Pero no todo ha sido malo. El 2015, el club de Santiago debutó en la Tercera B con un quinto lugar en la zona sur.

“Ese año hicimos una campaña tremenda. Tuvimos dos pretemporadas y en ambas la parte más importante fue la espiritual, no la física. De tanto escuchar de Dios, los muchachos creyeron a ciegas en él. Eso permitió que diéramos vuelta cinco o seis resultados imposibles”, señaló Óscar Rojas, el fundador y DT del club.

“Jugamos en Tomé, con unas 800 personas en el estadio. Como a la mitad del segundo tiempo, ellos nos hicieron un gol y la gente nos gritaba: ‘¿Dónde está su Dios, canutos tal por cuales?’. Yo me molesté y le pregunté a uno de mis delanteros: ‘¿Cuánto amas a Dios?’, y él me respondió ‘demasiado profe’. Le dije: ‘Entra y haz dos goles’. Y el chico con la guata más grande que he visto en el fútbol hizo un doblete llevándose a los defensas en velocidad”, recordó.

Para el estratega la razón por los malos resultados es clara. “Estos años han sido duros. Se ha dejado de lado a Dios y nos ha pesado muchísimo. Si nos recuperamos, podemos dar pelea nuevamente”, cerró.