Corría el año 2003 y un joven Cristiano Ronaldo comenzaba a llamar la atención por sus dotes con la esférica. Su temprano debut en el Sporting de Lisboa hizo que Jorge Mendez, su agente por aquel entonces, se la jugara por él y utilizara sus influencias para llevarlo a una liga de mayor envergadura.

Para realizar esto, el empresario se contactó con un viejo amigo italiano, quien le ayudó a acercar al atacante a los clubes más importantes de la liga: el Parma y la Lazio. No obstante y para sorpresa de todos, ambos conjuntos rechazaron hacerse dueños de los servicios de quien es hoy el mejor jugador del mundo.

¿El motivo? su juventud. Y es que, aparentemente, los elencos italianos no confiaban que un jugador tan joven pudiese tener un futuro tan brillante.

“Era un muchacho de 18 años que acababa de debutar en el Sporting y Mendes pretendía traerlo a Italia. En Gea intentamos ayudarle. Se lo ofrecimos al Parma y al Lazio, pero fue rechazado en los dos. Tenía talento pero era demasiado joven y no confiaban”, indicó Alessandro Moggi al medio itálico, Tuttosport.

Dicha falta de “fe” hacia el portugués puede que haya sido el peor error del Parma, quien no solo presentó su quiebra en el año 2015, sino que también hoy juega en la Serie D de Italia.

Quien si aceptó contratar al atacante en ese entonces fue la Juventus. No obstante y pese a su buena voluntad, dicha acción no se pudo concretar dado que el Manchester United ofreció 12 millones de libras por sus servicios, cifra imposible de rechazar por Mendez.

“Esa operación podría haber cambiado la historia del fútbol europeo. Lo pensé un millón de veces en los días que estuve en Lisboa. Viendo su actitud y cómo es creo que a día de hoy podría seguir siendo bianconero”, aseguró Moggi.