Para nadie fue secreto que durante el duelo de Chile y Paraguay, Alexis Sanchez estaba, pero no estaba. Y es que en el cotejo válido por las Clasificatorias rumbo a Rusia 2018, el “Niño Maravilla” se encontraba ido y cabizbajo, quizás, por su fallido traspaso al Manchester City.

Según puso constatar El Mercurio, al medio día de ayer parecía que salía humo blanco y Thomas Lemar del AS Mónaco sería el candidato ideal para reemplazar a Sánchez y militar las filas del conjunto inglés.

No obstante, todo se derrumbó. Y es que si bien los 100 millones de dólares que había ofrecido el elenco rojo si habían seducido al volante francés, fue la poca competitividad, puesto que el Arsenal no disputa la Champions League, lo que terminó por echar por la borda el traspaso.

Pese a esto, mientras los gunners buscaban al francés, “Sánchez firmaba los papeles que lo unirían al equipo de Guardiola por las próximas cuatro temporadas”, aseguró el vespertino, agregando que sería este “mismo documento entre las partes involucradas- Arsenal, City y el jugador- el que los celestes llevarán a tribunales, pues demandarán a sus rivales por incumplimiento de contrato”.

Tras esto, poco y nada era lo que el atacante podía entregar ante el conjunto paraguayo. Y es que de momento al goleador de la “Roja” solo le queda respetar el contrato que lo une al Arsenal hasta junio de 2018. Luego de ello, Sánchez podrá aceptar cualquier oferta laboral, aunque en diciembre próximo ya podrá negociar como un “jugador libre”, y dejar a los “artilleros” sin darle ningún peso a las arcas.